El ministro de Educación, Daniel Rojas, aseguró que el Instituto Colombiano de Crédito Educativo y Estudios Técnicos en el Exterior (Icetex) no desaparecerá, sino que por el contrario está en un proceso de transformación para ser un aliado educativo que priorice a las poblaciones más vulnerables.
El funcionario desmintió en ese sentido, este jueves, las versiones que hablan de un recorte de $432.000 millones a los recursos destinados al Icetex para la vigencia 2024.
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La cartera de Educación aclaró que el retraso en el giro de 432 mil millones de pesos para 2024 responde a decisiones presupuestales del Ministerio de Hacienda, que, debido a la situación fiscal, priorizó giros para atender emergencias nacionales como la ola invernal.
El ministro de Rojas aseguró que es falso que esos recursos se hayan recortado y dijo que están reprogramados por el Ministerio de Hacienda para ser girados al Icetex en los próximos meses y así cumplirles a los jóvenes universitarios. Por ello, asegura, ningún estudiante se verá afectado con falta de giros.
“El Icetex no está en proceso de marchitamiento ni de quiebra. Por la Ley 1002 de 2005 es una entidad financiera vinculada al Ministerio de Hacienda y Crédito Público, que recibe recursos de diferentes fuentes como el ministerio de Educación y otros ministerios, entes territoriales, banca de inversión, portafolios de inversión, regalías y de los mismos intereses que recaudan de los jóvenes estudiantes”, señaló el ministro.
En cuanto al presupuesto proyectado para 2025, el Ministerio de Educación aclaró que el Icetex enfrentará una reducción significativa debido a la coyuntura fiscal del país. “Estamos gestionando recursos adicionales para garantizar los fondos poblacionales y las condonaciones, así como los subsidios a la tasa de interés y el sostenimiento. No vamos a dejar de girar los recursos ni a debilitar nuestra misión educativa”, enfatizó el ministro.
Fortalecimiento de las Instituciones de Educación Superior públicas
Rojas subrayó que, aunque preside la Junta Directiva del Icetex, las decisiones son tomadas de forma colegiada por sus integrantes, como ocurre en cualquier junta directiva. Esta estructura incluye representantes del Ministerio de Educación (con un solo voto), universidades públicas y privadas, y entidades territoriales, lo que garantiza un gobierno corporativo diverso y equilibrado.
El debate sobre el Icetex pone de manifiesto una problemática estructural que ha afectado a la educación superior en Colombia durante años. Históricamente, el presupuesto público ha privilegiado mecanismos de financiamiento a la demanda, como el programa ‘Ser Pilo Paga’, que otorgaba créditos condonables, dejando a muchas familias y jóvenes en riesgo de endeudamiento.
Esta política contrasta con la situación de las instituciones públicas de educación superior, que han enfrentado un desfinanciamiento sostenido. Ejemplos como la Universidad de Antioquia y los Institutos Técnicos y Tecnológicos Universitarios (ITTU), muchos de los cuales nacieron sin una base presupuestal para su funcionamiento, evidencian la crisis.
“La educación no puede seguir siendo vista como un servicio financiero. Por eso estamos trabajando para fortalecer las instituciones públicas y garantizar oportunidades para todos los sectores, incluyendo a indígenas, afrodescendientes, víctimas de la violencia, personas con discapacidad y población Rrom”, puntualizó Rojas.
