En la tarde de este viernes 26 de abril, el presidente Gustavo Petro visitó el municipio de Zipaquirá, Cundinamarca, donde pasó buena parte de su infancia y su juventud. Durante el evento público no solo aprovechó para referirse a su crianza y su formación, sino que también recordó su pasado como militante activo de la guerrilla del M-19, que se desmovilizó definitivamente a principios de los años 90.
Durante su intervención ocurrió un escena que desde ya ha empezado a generar una intensa controversia en la opinión pública y en las redes sociales. Tras encontrarse con excompañeros de la desmovilizada guerrilla, les pidió que sacaran la bandera del M-19. “A ver, compañero, entregue esa bandera porque estamos hoy de fiesta”, dijo el primer mandatario. “No les gusta que la saquemos, ¿cierto? Pero no va a estar debajo de los colchones”, agregó más tarde.
Más tarde, señaló que este viernes 26 de abril se está conmemorando un día más de la muerte del excomandante del M-19, Carlos Pizarro.
Pronto, cientos de personas empezaron a criticar la actuación del primer mandatario por hacerle un homenaje a un desaparecido grupo insurgente.
“¡Petro, respete al país! Aquí los únicos que sienten simpatía por el M-19 son los criminales. Este acto es una afrenta contra las víctimas del Palacio de Justicia, los más de 500 secuestrados y tantos torturados y asesinados por ese grupo”, escribió en su cuenta de X (antes Twitter), la senadora del Centro Democrático María Fernanda Cabal.
Excompañero del M-19 del Presidente no aguantó las lágrimas
Durante el evento, el presidente Petro le pidió a uno de sus excompañeros del M-19, Héctor Alirio Borbón, que pasara al escenario donde estaba dando su discurso. Allí, su excompañero lo abrazó, y no pudo evitar llorar mientas lo saludaba.
Luego, el primer mandatario recordó que el hombre era oriundo de Pacho, Cundinamarca, y que lo encarcelaron con él.