Gabriel González, el hombre de 50 años, padre del niño de 5 años al que llevó con engaños hasta Melgar para asesinarlo y luego enviarle la fotografía a su expareja, fue condenado a 45 años de prisión al ser encontrado culpable. Un juez de la República lo condenó a 540 meses de cárcel.
Los hechos ocurrieron el pasado 4 de octubre, cuando asfixió a su hijo como venganza contra su expareja y madre el niño porque había decidido acabar con la relación sentimental que tenían.
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“En la tarde del domingo 2 de octubre, la madre llamó a su expareja para preguntarle por la hora en la que regresaría al niño a la casa; sin embargo, el hombre no contestó y respondió con un mensaje por WhatsApp en el que le pedía a la mujer ubicar una memoria USB que había dejado en el baño del inmueble. El dispositivo contenía videos en los que González Cubillos se mostraba amenazante y con la intención de hacerle daño al menor de edad”, indicó la Fiscalía en un comunicado que conoció El Espectador.
González una vez cometió el homicidio le envió un mensaje a su expareja acompañado de una fotografía en la que aparece el niño sin vida. El texto decía “hora de fallecimiento 3:55 a.m., asfixia mecánica. No sufrió. Ahora sí puedes disfrutar sola con Edilson y Wesly, sin Tricitico ni mucho menos yo. Felicidades”.
Las últimas palabas del niño
El gerente del Hotel El Rey, lugar del los hecho, reveló las últimas palabras del pequeño Gabriel horas antes de ser asesinado.
El hombre contó que el niño llegó junto a su padre, que era muy curioso y que veía la pecera que estaba en el lugar preguntando a su padre por los peces. De igual forma, señaló que “el niño venía diciendo: ‘Papá, vamos a ir a la piscina’”.
