La denuncia sobre el secuestro de la pequeña Antonella, una bebé de 18 meses, corrió como pólvora en Medellín. Los vecinos, las personas en redes sociales y las autoridades empezaron una búsqueda inmediata para que el hombre que se la llevó la devolviera o no lograra sacarla de la ciudad.
El hecho sucedió el miércoles, hacia la 1:30 p.m., en Campo Valdés, en la carrera 50 con calle 78. Los familiares de la menor advirtieron que un sujeto se había llevado a esta bebé de año y medio de la casa de su bisabuela. En el momento del rapto la menor tenía una blusa rosada, jean y zapaticos blancos.
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Al poco tiempo la Policía de Medellín ofreció 50 millones de pesos por información que permitiera dar con el paradero de la menor.
Finalmente, hacia las 4 de la tarde, las autoridades confirmaron que la niña había aparecido en el tercer piso de la vivienda. ¿Qué pasó?, se preguntaron los paisas en redes sociales.
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Al parecer, la madre de la menor la dejó en casa de su bisabuela, quien era la encargada de cuidarla mientras la mamá estaba trabajando. Sin embargo, en un momento de descuido no vio a la niña y empezó a buscarla en la casa de los vecinos.
Uno de ellos tenía una cámara de seguridad y al revisar los videos se dio cuenta que un hombre llevaba en brazos a una bebé con las mismas características de Antonella. Entonces, decidieron dar aviso a las autoridades.
Luego de desplegar todo un operativo de búsqueda, uno de los uniformados encontró a la niña dentro de la misma casa donde desapareció y se la entregó a sus padres.
“Me alegra informar que la menor Antonella Gómez Arango ya se encuentra con su familia, desde el Distrito hay un equipo acompañándolos. Gracias a Dios y las autoridades por su trabajo”, indicó el alcalde encargado de Medellín, Óscar Hurtado Pérez.
Sin embargo, en redes quedó una confusión sobre lo sucedido. Según la Policía, el caso sigue siendo materia de investigación para establecer si la niña siempre estuvo dentro de la vivienda o si su raptor decidió devolverla ante la presión de las autoridades.
