En la madrugada del martes 14 de diciembre, Colombia recibió la noticia de que en el aeropuerto Camilo Daza de la ciudad de Cúcuta se habría registrado una explosión a las 5:25 de la mañana, cuando un hombre habría saltado por las rejas de seguridad activando un artefacto explosivo.
Tras la primera explosión, los corresponsales locales llegaron al lugar para contar lo sucedido, sin embargo, minutos después se registraría una segunda explosión allí mismo. En este hecho habrían perdido la vida dos uniformados de la policía quienes se encontraban revisando una caja sospechosa.
Una de las periodistas que llegó al aeropuerto para narrar lo ocurrido con la primera explosión fue Julieth Cano, corresponsal en Norte de Santander para Caracol Televisión y Blu Radio, quien además, pudo ser testigo de la segunda explosión.
Haciendo un informe en vivo para el noticiero de la mañana en Blu Radio, en conversación con el director del espacio, Néstor Morales, la periodista entró en un estado de shock tras haber visto lo ocurrido y entre lágrimas tuvo que cortar la llamada.
“¡Dios mío, Dios mío, esto es increíble! Dios mío, me tengo que retirar. Ya nos tenemos que ir, Néstor”, dijo Cano en medio de un llanto desesperado finalizando así la comunicación.
Y es que no era para menos, hacía contados minutos, su camarógrafo había presenciado cómo los dos integrantes de la policía se acercaban a revisar la caja, segundos después, escucharía el estallido viendo a su vez el deceso de los uniformados.
Durante la comunicación, incluso, se le escucha al acompañante de Julieth decir “Ahí están los cuerpos”, lo cual indicaba que la escena estaba realmente más cerca de lo que se imaginaban.
Los integrantes de la mesa de trabajo de la emisora resaltaron la valentía de Julieth Cano al intentar contar lo sucedido, de hecho, Felipe Zuleta, periodista también, aseguró que en su caso no habría podido ni siquiera hablar 15 minutos después de ver esa escena de terror.
Posteriormente, Cano intentó salir en la emisión de Noticias Caracol narrando lo ocurrido en Cúcuta, sin embargo, el llanto volvió y no pudo finalizar su informe.