El inicio de 2022 para el tenis se tornó polémico.
Polémica por Djokovic en Australia
No era para menos, pues la participación de Novak Djokovic, el mejor jugador de la actualidad para la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), recibió una exención para jugar el Australia Open.
De esta forma, el serbio tiene la oportunidad de jugar el primer Major de la temporada, a pesar de no haberse vacunado contra el coronavirus, en pleno rebrote mundial de la pandemia, debido a la presencia de Ómicron.
Así, Nole buscará su cuarta estrella consecutiva del torneo y la décima de la historia, para separarse como el más ganador de la historia. De hecho, ya dejó muy atrás a Roy Emerson y Roger Federer, con seis títulos.
La decisión del torneo, la cual fue presumida por el serbio en las redes sociales, traspasó el tema deportivo. Los propios internautas criticaron la exención a Nole, pues, desde su punto de vista, alienta a las personas que no se quieren vacunas, en lugar de poner un ejemplo para la inoculación.
Problemas a su llegada
Pero el tema no paró ahí. El número uno llegó a Australia y se encontró con la sorpresa de que las autoridades retrasaron su salida del aeropuerto local, luego de las interrogantes que existen en torno a la evidencia que respalda su permiso especial, además de que detectaron potenciales problemas con la visa solicitada.
De acuerdo al diario australiano The Age, el avión que trasladaba al serbio aterrizó cerca de las 23:30 horas en el Aeropuerto Internacional Tullamarine de Melbourne, Victoria. Sin embargo, el atleta aún no era habilitado para traspasar las fronteras de migraciones y estaba siendo interrogado por funcionarios estatales en una habitación del lugar.
Tennis Australia, la organización deportiva al mando del torneo, aseguró que la gran mayoría de las solicitudes que recibieron para exenciones médicos de los jugadores fueron realizadas por personas que tuvieron COVID-19 en el último medio año. “Es muy probable que la exención de Djokovic fuera otorgada por ese motivo”, dijeron tres fuentes de alto nivel al periódico australiano.
Lo cierto es que el gobierno federal tiene dudas sobre si el serbio tiene la documentación adecuada para demostrar la argumentación de su exención, lo que debe mostrar en las fronteras.