El Gobierno colombiano y los indígenas del departamento del Cauca que desde el pasado 11 de marzo bloquean la Vía Panamericana, en el suroeste del país, llegaron a un acuerdo que permitirá levantar la protesta, informaron este sábado fuentes oficiales.
«Este acuerdo tiene como objetivo fundamental solucionar los problemas que históricamente se han quedado sin resolver, por exceder la capacidad de cumplimiento del Estado y porque los compromisos adquiridos en el pasado sobrepasaban la realidad fiscal colombiana», señala un comunicado divulgado por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz.
Con el arreglo, al que se llegó después de una intensa jornada de negociación que se prolongó hasta la madrugada de hoy en el aldea de Mondomo, del municipio de Santander de Quilichao (Cauca), «las comunidades indígenas se comprometen a desbloquear definitivamente la Vía Panamericana», agregó la información.
La protesta, liderada por el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) para exigir al Gobierno que cumpla con unos 1.300 acuerdos que alcanzaron con Ejecutivos anteriores, ha afectado a los departamentos de Cauca, Nariño, Valle del Cauca y Huila, principalmente los dos primeros donde hay desabastecimiento de víveres y combustible.
Según el comunicado, el acuerdo negociado es una concertación sobre el plan de inversiones que debe ser aprobado por una comisión mixta compuesta por representantes del Gobierno nacional y los pueblos indígenas.
Dicho plan de inversiones contiene compromisos en las áreas de «vivienda nueva y mejoramientos de vivienda, salud, proyectos productivos e infraestructura rural, vías, economía naranja y unidad de protección» contra la violencia en la zona.
«Se trata de un acuerdo fiscalmente responsable y cuenta con un consenso sostenido por la realidad» ya que «de los 4,6 billones de pesos (unos 1.472 millones de dólares) que exigían las comunidades indígenas del Cauca se concertó asignar un 17,5 %, monto que previamente estaba contenido en el plan de inversión para la región del Cauca», añade el texto.
En cuanto a los habitantes de los cuatro departamentos afectados por el bloqueo de la Panamericana, el Gobierno dijo que «implementará medidas que mitiguen los impactos negativos sufridos durante los días de paro».
Las negociaciones con los indígenas, que se iniciaron hace casi dos semanas, fueron encabezadas por la ministra de Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, y el alto comisionado para la Paz, Miguel Ceballos.
Como garantes en el diálogo estuvieron Naciones Unidas, la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de Estados Americanos (MAPP/OEA) y la Defensoría del Pueblo.
Algunas jornadas de la protesta derivaron en violencia, como consecuencia de lo cual un policía fue asesinado con un disparo en el cuello, mientras que siete uniformados más resultaron heridos, y varios vehículos que circulaban por vías alternas a la Panamericana fueron atacados.
Además, un indígena murió el pasado martes luego de que las «Fuerzas Militares, Policía y Esmad (Escuadrón Móvil Antidisturbios) arremetieron de manera desmedida contra las personas», según denunció el CRIC.