Valencia es precandidata?
Me lanzo de pre-precandidata, porque yo creo que hay que esperar para mirar realmente mis posibilidades en la política con una niña recién nacida, si aguanta las giras y todo lo que viene, pero lo que más quiero es saber mis posibilidades dentro del Centro Democrático porque yo quiero que el uribismo gane las elecciones en 2018 y yo creo que el nombre de quien sea el candidato es un tema secundario. Estoy dispuesta a acompañar a cualquiera de mis compañeros con todo el entusiasmo y con toda la vocación de ver triunfar a mi partido para recuperar a Colombia.
Desde que supimos de sus intenciones políticas hasta hoy, ¿qué ha conseguido?
El cariño de los colombianos. El sentimiento de que el trabajo que hemos venido haciendo le ha gustado a mucha gente y la gente reconoce mi trabajo.
¿Qué se ha hablado con los otros precandidatos?
Todo. Hablamos todo. Creo que el partido tiene un privilegio que muy pocos tienen. Ha propuesto precandidatos todos nuevos, todos con ideas, ninguno mezclado con politiquería o corrupción y ese es un lujo que muy pocas colectividades se pueden dar: traer gente nueva a la política, buscar a gente joven y yo creo que habla muy bien del Centro Democrático, y sobre todo, habla muy bien del presidente Uribe. Yo creo que es un líder que tiene el país metido en la cabeza, que realmente está comprometido con un proyecto político mucho más allá de lo que le puedan importar sus causas personales.
Pero los precandidatos están con el político mayor… Con un expresidente que ahora es senador.
La politiquería tiene que ver con la utilización indebida de los recursos públicos para obtener votos. Evidentemente, quien es expresidente desde hace ya siete años no tiene recursos a su disposición. Lo que tiene el uribismo es el voto de opinión de los que saben que ese gobierno funcionó, que ese gobierno cambió sus vidas y por lo tanto confían en el presidente Uribe. Yo creo que el Centro Democrático es el partido con más voto de opinión política en el país y que independientemente de todo el desprestigio que este gobierno le ha hecho al presidente Uribe, la gente sigue recordándolo por lo que hizo y no por una plata que se le entregue a nadie durante elecciones.
¿Cuál es su visión de política dentro del centro Democrático?
Yo soy una uribista convencida, porque creo que el triángulo de cómo se deben manejar las relaciones entre Estado-ciudadanía-sociedad es la pregunta fundamental, y yo creo que ahí están las fórmulas. Un Estado que escuche a los ciudadanos, un Estado que sea austero y disciplinado en el gasto público, que combata la corrupción, y un Estado que crea en las regiones, que sea descentralizado. Yo creo que debemos buscar un Estado que cree políticas públicas que favorezcan a los ciudadanos, independientemente de dónde se nazca para que pueda tener igualdad de oportunidades. Acá lo que se quiere es que el sector privado florezca para crear empleo y recoger los recursos necesarios para hacer la política social. Yo soy una persona que cree que se necesitan instituciones y que está dispuesta a institucionalizar este país.
¿Paloma Valencia es de derecha?
Es que esa distinción entre derecha o izquierda es muy confusa hoy en día. Si hablamos de libre mercado sí soy de derecha, si se trata de creer que los problemas sociales no se pueden abordar desde la derecha, entonces soy de izquierda… Si la derecha se trata de que la autoridad no tiene límites, entonces soy de izquierda… La tensión que define los problemas de Colombia no es la derecha o la izquierda, es una cuestión más de valores. Cosas como si uno considera que la justicia es importante o no; si uno considera que la negociación o la “paz”, como llaman ahora, lo vale todo o debe tener límites.
Hablando de paz, ¿luego de que se entregan las armas no podemos dejar chuleada la paz?
No, yo no creo que se pueda hablar de paz cuando en el país existen más de 188.000 hectáreas de cultivos ilícitos. Yo no creo que la violencia en Colombia sea política, la violencia en el país tiene que ver con unos recursos ilícitos y la necesidad de proteger esos recursos ilegales que corrompen y que cuando el Estado entra a defender, se crea violencia. En ese mismo sentido, creo que no son buenos para Colombia los procesos de impunidad. Creo que se está volviendo ley que uno puede alzarse en armas y que después uno puede simplemente negociar con los gobiernos, recibir impunidad y entrar a la política y nada pasó. Entonces grupos como el Eln creen que la violencia es un camino efectivo para acceder a la política y ese es un mensaje errado. ¡Hay crímenes que no se van a aceptar!
¿Siente que es posible una alianza con Alejandro Ordóñez?
Yo creo que todas las fuerzas que apoyaron el ‘no’ el 2 de octubre deben estar unidas y luchar por los mismos ideales. Lo importante no es la persona, lo importante son las ideas en común que lleguen a gobernar y entreguen lo mejor.
¿Cómo gobernar con la sombra de Álvaro Uribe Vélez?,¿es el titiritero que mueve los hilos de las marionetas?
No, yo no creo que nadie en el Centro Democrático pueda posar de marioneta. Todos tenemos muchísimo carácter. Somos un grupo de personas comprometidas. Lo que pasa es que sí compartimos una ideología. Entonces, yo creo que el presidente Uribe no será titiritero, será un apoyo. Tener a Álvaro Uribe cerca es una bendición.