Con preguntas tan sencillas como cuántas personas habitan el hogar, cuánto pagan en promedio por el servicio de energía eléctrica y por el servicio de gas domiciliario, si tiene vehículo propio y si usa transporte público, los caleños podrán calcular el impacto en el cambio climático de las actividades que realizan en su cotidianidad.
Esto se logra a través de CaliHuellaC, una aplicación móvil desarrollada con el apoyo de la Alcaldía de Cali y el Dagma para que los ciudadanos tomen conciencia y cambien esos hábitos que están afectando al planeta.
CaliHuellaC es uno de los resultados del proyecto Huella de Ciudades, que inició en marzo del 2016 y cuyo objetivo es promover el desarrollo urbano bajo en carbono y resiliente al clima en Latinoamérica a través de la huella de carbono y la huella hídrica como herramientas de gestión de las ciudades.
De Colombia, la capital vallecaucana es la única ciudad que participa en este proyecto junto a otras como Tarija (Bolivia), Loja y Santa Cruz de Galápagos (Ecuador) y Recife (Brasil). Los recursos para la financiación provinieron del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) y la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD).
De acuerdo con Janeth Alegría, subdirectora de Calidad Ambiental del Dagma, “Herramientas como la aplicación son importantes porque nos permiten como usuarios y consumidores ser más eficientes, pues al conocer cuánto consumimos podemos fijar acciones de reducción. Esto tiene un doble propósito: en primer lugar, ser más eficientes con el medio ambiente; en segundo lugar, gastar menos”.
Cali, una ciudad con poca generación de CO2
La buena noticia es que no estamos mal y tendemos a mejorar. Según una medición del Dagma, los caleños producen dos toneladas métricas por persona de Dióxido de Carbono cada año, cifra satisfactoria cuando el promedio nacional es 3,7 y el de Latinoamérica es 2,1.
Para continuar con los buenos resultados, bajo la sombra del proyecto Huella de Ciudades se pretenden implementar otras estrategias como la ampliación de ciclorrutas y la promoción del uso de la bicicleta como medio de transporte; los ‘Ecobarrios’, que tendrán techos verdes con páneles solares y herramientas para la recolección y el uso de las aguas lluvia; y el corredor verde, un proyecto de infraestructura que comunicaría la ciudad a través de la vía férrea.
Quienes quieran utilizar la aplicación para medir el impacto que con sus acciones le causan al ambiente, pueden descargarla de manera gratuita.