Las criptomonedas son un tipo de moneda digital o virtual que emplea una tecnología denominada criptografía para garantizar la seguridad de las transacciones y así verificar las transferencias de los activos. Debido a su auge y diferencia con las monedas tradicionales, cada vez son más las personas que se interesan en entender el mundo de estos activos virtuales. Pero, al mismo tiempo, esto supone un reto enorme porque los ciberdelincuentes aprovechan las brechas de conocimiento para poder cometer estafas.
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Para entender este fenómeno, inicialmente hay que tener presente que a diferencia de las monedas tradicionales, las criptomonedas no son emitidas ni controladas por una autoridad central, como un banco central o gobierno, lo que las convierte en descentralizadas, dándoles así una ventaja cuando de transacciones se habla. Debido a su origen, su valor puede fluctuar significativamente en cortos periodos de tiempo.
¿Cuáles son las criptomonedas más populares?
- Bitcoin (BTC): Fue la primera criptomoneda y sigue siendo la más conocida y valiosa.
- Ethereum (ETH): Ofrece una plataforma para contratos inteligentes y aplicaciones descentralizadas (dApps).
- Binance Coin (BNB): Criptomoneda utilizada principalmente en la plataforma Binance.
- Tether (USDT): Una stablecoin cuyo valor está vinculado al dólar estadounidense.
- Dogecoin (DOGE): Nacida como una broma, pero con una gran comunidad de usuarios.
El criptocrimen sigue en aumento según estudio reciente
Hasta ahora, 2022 había visto la mayor transferencia de criptomonedas a direcciones ilícitas en la red, con $54 mil millones de dólares. Pero, según un análisis de Chainalysis, durante 2024 direcciones ilícitas en internet recibieron $40.9 mil millones de dólares, una cifra que podría llegar a los $51 mil millones de dólares una vez que se terminen de analizar los datos del periodo, volviendo así a ese año como uno de los que más movimientos ilícitos se generaron en esta moneda.
Para Eric Jardine, Líder de Investigación en Cibercrímenes de Chainalysis, “un creciente número de los actores ilícitos, incluyendo a los grupos transnacionales del crimen organizado, están explotando las criptomonedas para financiar una serie de actividades delictivas, como son el tráfico de drogas, robo de propiedad intelectual, lavado de dinero, tráfico de personas y animales silvestres, así como crímenes violentos. Notablemente, algunas redes criminales voltean a ver a las criptomonedas para participar en múltiples formas de actividades delictivas”.
Cabe destacar que, durante 2021, el BTC fue inequívocamente la criptomoneda preferida por los ciberdelincuentes, probablemente debido a su alta liquidez. Sin embargo, desde entonces se ha observado una diversificación constante que se aleja de BTC, y las monedas estables ahora ocupan la mayoría del volumen de transacciones ilícitas (63% de todas las transacciones ilícitas).