A medida que la tecnología avanza, las preocupaciones sobre la invasión a la privacidad crecen y surgen preguntas inquietantes como por ejemplo: ¿Está mi smartphone escuchando las conversaciones? ¿Realmente puedo confiar en los dispositivos que me acompañan a todas partes?
Para nadie es un secreto: prácticamente todos llevamos nuestros teléfonos móviles a todas partes. Estos dispositivos han dejado de ser meros instrumentos de comunicación para convertirse en verdaderos asistentes personales, capaces de realizar múltiples funciones, desde hacer compras hasta monitorear nuestra salud.
¿Esta conveniencia viene acompañada de un precio?
El doctor en Economía y Empresa de la Universidad Autónoma de San Luis de Potosí (México), Juan Carlos Yáñez-Luna, plantea algo alarmante: ¿Está nuestra privacidad en juego?
Y es que, según el académico, aunque un teléfono móvil esté apagado puede estar “escuchando” o “visualizando” nuestros movimientos. Este planteamiento pone de manifiesto una realidad incómoda que indica que no somos los únicos que accedemos a la información almacenada en nuestros dispositivos.
¿Quiénes pueden acceder a nuestros datos?
Los servidores donde se guarda nuestra información, así como las plataformas que utilizamos (tales como Facebook o Google Maps) también pueden acceder a nuestros datos.
A modo de ejemplo, Google Maps puede conocer la ubicación y las rutas que hemos seguido en un determinado momento.
Dispositivos inteligentes: ¿compañeros o espías?
Pero no solo los smartphones pueden espiarte. Los dispositivos inteligentes e tu hogar, tales como altavoces, cámaras de seguridad y aires acondicionados, también están bajo sospecha.
Un reciente estudio ha demostrado que estos dispositivos pueden ser utilizados para espiarnos y robar nuestra información. Y es que la tecnología que nos facilita la vida también puede ser una puerta de entrada para quienes desean acceder a nuestros datos personales.
¿Pero cómo es posible que estos dispositivos nos espíen?
La respuesta está en la conectividad constante de estos aparatos a internet y su capacidad para recolectar datos. Cada vez que hablamos cerca de un altavoz inteligente o utilizamos una cámara de seguridad conectada, existe la posibilidad de que estos dispositivos estén grabando y transmitiendo información a terceros.
Un ejemplo claro es el uso de asistentes de voz, como Siri o Google Assistant, que están constantemente escuchando nuestras órdenes para ofrecer respuestas inmediatas. Aunque esto es práctico, también significa que estos dispositivos están siempre alertas, potencialmente grabando más de lo que deberían.
¿Cómo proteger su privacidad en el hogar?
La idea de que nuestros teléfonos móviles y otros dispositivos inteligentes pueden estar espiándonos no es solo una teoría conspirativa. Existen pruebas y testimonios de expertos que indican que nuestros datos están en riesgo y que la vigilancia a través de dispositivos móviles es una realidad.
Sin embargo, también es cierto que podemos tomar medidas para proteger nuestra privacidad y minimizar los riesgos. Según los expertos, es crucial que los usuarios sean conscientes de qué dispositivos y/o aplicaciones tienen acceso al micrófono y otros recursos sensibles.
Para evitar ser espiados, estas son algunas recomendaciones prácticas:
- Revisa los permisos: Si una aplicación pide acceso a funciones que no están relacionadas con su propósito principal, considera buscar alternativas.
- Lee los términos de uso: Estos documentos suelen detallar qué tipo de datos recopila la aplicación y cómo se utilizan.
- Configura los accesos: Desactiva estos permisos para aplicaciones que no los necesiten para funcionar correctamente.
En dispositivos Android, por ejemplo, puedes ir a “Configuración”, luego a “Aplicaciones y notificaciones” y, finalmente, a “Administración de permisos” para gestionar qué aplicaciones tienen acceso al micrófono. Por su parte, en dispositivos iOS, puedes hacerlo a través de “Ajustes”, luego “Privacidad” y, finalmente, “Micrófono”.