Ann sufre una parálisis desde hace más de 18 años, cuando fue víctima de un derrame cerebral. Desde entonces no pudo hablar ni escribir. Hasta ahora: la paciente habló utilizando la Inteligencia Artificial.
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Científicos de la Universidad de California en San Francisco y de la Universidad de Berkeley desarrollaron una interfaz cerebro – ordenador (BCI) que permitió a la mujer de 47 años hablar a través de un avatar.
Gracias al algoritmo de la Inteligencia Artificial los investigadores convirtieron las señales cerebrales de Ann en una voz sintética y un avatar animado, que imita expresiones faciales.
Personalizaron la voz para que sonara como la de la mujer antes de su derrame cerebral, entrenándola con grabaciones del video de su boda.
“El simple hecho de escuchar una voz similar a la tuya es emotivo”, afirmó Ann en una sesión de retroalimentación después del estudio. “¡Cuando tuve la capacidad de hablar por mí misma fue enorme!”.
Así se logró que una paciente con parálisis pudiera hablar, gracias a la Inteligencia Artificial
Los investigadores, liderados por el neurocirujano Edward Chang, utilizaron una técnica denominada electrocorticografía. Consiste en colocar un rectángulo delgado con 253 electrodos en la superficie de la corteza cerebral de la paciente.
Con ello, pudieron registrar la actividad combinada de miles de neuronas al mismo tiempo. Acto seguido, el equipo de Chang entrenó algoritmos de Inteligencia Artificial para reconocer patrones en la actividad cerebral de Ann, asociados con sus intentos de pronunciar 249 oraciones usando un vocabulario de 1024 palabras.
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El dispositivo, como apunta Nature, produjo 78 palabras por minuto con una tasa media de error de palabras del 25.5%.
“Nuestro objetivo es restaurar una forma de comunicación plena, que es realmente la forma más natural para nosotros de hablar con los demás”, señaló el doctor Chang. “Estos avances nos acercan mucho más a hacer de esta una solución real para los pacientes”.
Para los científicos, el próximo paso es crear una versión inalámbrica de la interfaz cerebro – ordenador para implantarse debajo del cerebro.