No es un secreto que aunque la tecnología siempre ha desarrollado herramientas con el objetivo de facilitar tareas y optimizar tiempos, la delincuencia también aprovecha estas funciones para estafar a quienes no conocen con detalle cuándo están expuestos a información falsa o comportamientos maliciosos.
Puede leer: Estas son cinco señales con las que su celular pide ‘a gritos’ que lo cambie
De hecho, en las últimas semanas y tras el auge de lo conoce hoy en día como Inteligencia Artificial, las modalidades de estafa también aprovechan estos sistemas para crear técnicas y perfeccionar estrategias haciendo que más víctimas caigan. Precisamente, una de las nuevas modalidades se denomina ‘rostros GAN’.
Según la compañía de seguridad ESET, la tecnología GAN es un tipo de Inteligencia Artificial que permite crear rostros ficticios. A través de esta tecnología se pueden generar rostros realistas y otro tipo de imágenes, incluso audios o videos. Esto se vuelve sumamente atractivo porque de acuerdo a estudios existe un 50% de posibilidades de confundir un rostro falso con uno real.
Para Camilo Gutiérrez Amaya (Jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica) “si bien los rostros GAN son de gran ayuda para industrias como la de los videojuegos para la generación de rostros para los personajes, o para efectos visuales que luego son utilizados en películas, también pueden ser utilizados con fines malintencionados”.
Lea también: Hablemos de menstruación: esta herramienta tecnológica predice rasgos inusuales en su salud
¿Por qué los rostros GAN pueden ser peligrosos?
Teniendo en cuenta lo anterior, existen ya diversas estrategias en las que cibercriminales están empleando estas tecnologías, entre esas: crear perfiles falsos, hacer fake news, robos de identidad y fraudes en aplicaciones de citas y redes sociales, por nombrar algunos ejemplos.
¿Cómo evitar caer en estas prácticas fraudulentas?
Ahora bien, si usted quiere evitar caer en este tipo de estafas, lo más recomendable es:
Verificar la fuente: asegurarse de que la fuente de la imagen es confiable y verificar la veracidad de dicha imagen.
“No todo lo que brilla es oro”: desconfiar de las imágenes que parecen demasiado perfectas. Mayormente las imágenes generadas por este tipo de tecnología tienen un aspecto perfecto y sin defectos.
Verificar las imágenes y/o videos: existen algunas herramientas como Google Reverse Image Search en línea que pueden ayudar a verificar la autenticidad de imágenes y videos.
