Con el auge de las nuevas tecnologías, las modalidades de estafas también han evolucionado. Lo que hace que para muchos, detectar cuándo están siendo víctimas de falsas publicaciones o información falsa, sea todo un reto. Precisamente, ateniendo a una de las problemáticas más comunes, que es el hurto de dinero a través de internet, expertos de ESET dieron a conocer las modalidades más populares entre los ciberdelincuentes.
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1. Qué es el Phishing
Sin duda, una de las más conocidas es el Phishing. En su forma más simple, es un engaño en el que el cibercriminal se hace pasar por una entidad legítima (por ejemplo, un banco, un proveedor de comercio electrónico o una empresa de tecnología) para engañar a un usuario y convencerlo para que ingrese sus datos personales o descargue malware sin darse cuenta y así pueda acceder a toda su información.
Esta modalidad ha evolucionado a tal punto que, las víctimas pueden también recibir mensajes de texto (SMS) maliciosos, conocido como smishing, donde un ciberdelincuente se puede hace pasar, por ejemplo, por una empresa de entrega de paquetería, una agencia gubernamental u otra organización de confianza. Los estafadores pueden incluso llamarlo telefónicamente, en una forma de ataque conocida como vishing, donde nuevamente fingen ser una fuente confiable con el objetivo de convencer al individuo para que comparta los detalles de su tarjeta.
2. Qué es Malware
Básicamente, un Malware es un código malicioso que accede al registro de información del dispositivo en el que se descarga. Actualmente, se han desarrollado diferentes tipos de códigos diseñados para robar información. Según ESET, “Algunos pueden registrar las pulsaciones del teclado de la víctima; por ejemplo, mientras escribe los detalles de la tarjeta en un sitio de comercio electrónico o bancario”.
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3. Qué es Web skimming
Esta es una modalidad de estafa en la que, los ciberdelincuentes también instalan malwares en páginas de pago de sitios de comercio electrónico legítimos. Su éxito consiste en que estos códigos maliciosos son invisibles para el usuario, pero sustraen los detalles de la tarjeta a medida que son ingresados. En estos casos, según ESET, recomiendan al usuario comprar en sitios confiables y utilizar aplicaciones de pago de renombre, que probablemente sean más seguras.
