Lograr transportarse en ciudades como Bogotá, Londres o París se ha vuelto un verdadero desafío para quienes, día a día, se desplazan entre sus hogares y lugares de trabajo. El tiempo y el dinero que se gastan en este proceso generan un agotamiento constante, lo que lleva a muchos a preguntarse si existe una alternativa de transporte más compacta, cómoda y, sobre todo, económica.