Es claro que uno de los equipos en Colombia que más seduce a un jugador, inclusive, hasta los mismos empresarios, es Junior. Por su entorno, por todo lo que puede ofrecer la familia Char, dueña del club, la ciudad, en fin. Pero esa misma seducción a más de uno le ha jugado una mala pasada. Desde unidades que para llegar piden hasta el cielo, pasando por otros que para renovar exigen el premio mayor del Balotto finalizando con “managers” que quieren arreglar sus vidas con el onceno rojiblanco. Hay de todo.
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Hoy Junior sólo tiene definido como refuerzo al defensor central bogotano Daniel Rivera, procedente del Fortaleza. “El cachaco”, como ya lo apodan en Barranquilla, se vistió de cortos, y se puso a disposición junto al grupo de trabajo que ya adelanta trabajos de pretemporada en Barranquilla. De resto, en materia de caras nuevas, nada de nada. Puras especulaciones, cero oficialidad. Ni de los que han salido, que nos enteramos de que no siguen, por sus redes sociales. El misterio no sólo ronda por los que llegan, sino también por los que se van.
La buena noticia, en torno a los que se perdieron del panorama en este 2024 por lesión, pasa por la recuperación de Rafael Pérez, Jermein Peña y Leider Berdugo. Ya trabajan en campo y se convierten de entrada, en grandes alternativas para César Farías, a la hora de la confección de su nómina. Súmele la renovación de su contrato, por dos años, del arquero Jeferson Martínez, prenda de garantía bajo los tres palos de Junior cuando Santiago Mele no ha estado por convocatorias de la selección de Uruguay.
Y no vengo hoy a venderles la idea de las conversaciones adelantadas supuestamente por el retorno de Deiber Caicedo, o si hay algo avanzado con Roger Martínez, Daniel Ruíz, Jesús Rivas, Jeison Quiñones, entre otros. Me baso en lo oficial, y en ese orden de ideas, hasta ahora, no hay nada. No sé si el deseo de don Fuad sea, armar una nueva nómina, o sólo reforzar algunos sectores de la cancha solicitados por Farías. Si me lo preguntan, me quedo con lo último. Es que armar un nuevo equipo, en estos momentos, como muchos lo piden ante la pobreza futbolística mostrada casi por todos este año, es una tarea bastante complicada. Diría que es imposible, sin descartar que la gran mayoría de ellos, tienen contratos vigentes con la institución.
Lo mejor que debería pasar en Junior es acertar con los nombres que lleguen a reforzar al equipo. Jugadores de calidad y con verdadera responsabilidad dentro y fuera de la cancha. Jugadores con ambición y sentido de pertenencia dentro del terreno de juego. Pueda que esté pidiendo mucho, pero sé que aún existen en el mercado del fútbol colombiano y en el exterior.
Amanecerá y veremos. Ojalá tengan ese tacto para dar con los jugadores indicados.