Opinión

¿La última campanada de Nairo Quintana?

El tercer lugar de Nairo Quintana en los Campeonatos Nacionales de Ciclismo, sólo unos días después de que anunciara que no se retira, es el tema del día para Caballito de Acero

Nairo celebra el tercer lugar en los Campeonatos Nacionales de Ruta 2023
Nairo Quintana (EFE)

Un hombre mira por la ventana del bus mientras centenares de personas se agolpan temprano en la mañana alrededor del vehículo. Es la mirada escrutadora de un hombre que ha vivido las jornadas más duras de su carrera profesional en los últimos meses.

PUBLICIDAD

Las ovaciones a Nairo Quintana en la ciudad de Bucaramanga no se pueden explicar con razones terrenales, lo de Quintana roza lo divino. En la historia de las carreras pocas son las veces en las que un corredor ocupando el tercer puesto hace que el público por algunos momentos olvide quién fue el campeón de la jornada.

El campeonato Nacional de Ciclismo 2023 deja en mi memoria buenos recuerdos, pero nunca olvidaré dos cosas: el leñero tan violento que las mujeres nos regalaron el viernes y la locura que desata la presencia de Nairo por el lugar que pasa.

En mi vida nunca había asistido a algo como esto, las emociones que despierta “Kingtana”, como le dicen algunos de sus seguidores, solo lo he visto en el fenómeno del caudillismo, podríamos decir que Nairo es un Caudillo. Sin embargo, es un caudillo atípico, al contrario de lo que siempre ocurre, es una persona que habla bajito y quizás más pausado de lo que necesita un político para transmitir la fuerza y la energía necesaria en sus grandilocuentes discursos, su carácter es el típico estereotipo de boyacense: pausado y de trato afable. Ahora bien, esta figura de la que hablamos se diluye en el pasado, mientras la carrera profesional de Nairo sobre la bicicleta tiene signos de interrogación, las habladurías de que Nairo piensa en su futuro dentro de la política se hacen más fuertes, las fotos con Carlos Amaya, ex gobernador de Boyacá, hace que los chismes sin confirmar se extiendan.

Pero, ¿cómo un corredor que logra un tercer puesto en los Nacionales de Colombia sigue sin equipo? No es una respuesta fácil de responder, solo hay especulaciones. Lo cierto es que Nairo todavía tiene chispa en su cuerpo y lo demostró sobre la carretera, aquí es cuando uno saca las frases de cajón: “la carretera pone a cada uno en su sitio”.

Según el alcalde de Bucaramanga salieron casi 500 mil personas a las calles para apoyar el ciclismo, sin embargo, el nombre que más resaltaba, y casi que el único que se conocían era el de Nairo. Cada calle, cada esquina, cada avenida, cada balcón se escuchó el nombre del ciclista más grande de Colombia, el hombre que puso a soñar a Colombia en la década pasada.

El caudillo Nairo es un ciclista que despierta las pasiones más profundas del sentir colombiano sobre la bicicleta y encima de la tarima, lo sabe y seguramente en este momento su vida es un cúmulo de incertidumbres. La campana sonó para dar la señal de última vuelta y sentí miedo al imaginar que esa campana que escuché, podría ser la última campana de un Nairo que sabe que sobre una tarima está por encima del bien y del mal.

Tags

Lo Último