El tráfico decembrino se verá afectado por obras y cierres viales en uno de los corredores viales más importantes del país, que conecta a Bogotá con el norte del país y sobre todo el departamento de Boyacá. Según informaron las autoridades, el puente vehícular de la represa del Sisga estará cerrado por seis meses para realizar obras de reparación y mantenimiento de la estructura del puente de la doble calzada. Sumado a esto, varios habitantes de la zona han mostrado su preocupación por la afectación económica que tendrá el cierre de la calzada.
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El puente de la represa del Sisga hace parte de la troncal central del norte, que conecta a Bogotá con Tunja y tiene dos puentes, uno por calzada, para mejorar el tráfico del país. Además, esta importante vía es una de las principales del país y por donde pasa gran parte de la comida e insumos que llegan a Bogotá desde Boyacá, Santander y Arauca. Por esto, varios habitantes del sector se preguntan cuál será la afectación económica que tendrá el cierre de uno de los puentes del viaducto durante seis meses.
Según informaron, las obras empezarán el 2 de noviembre, día en el que uno de los puentes cerrará, e irán hasta el 25 de abril de 2025. Por esto, desde la constructora que está a cargo de las obras piden a los usuarios de la vía, ya sea conductores de carro, moto, bus, camión, mula, bicicleta, entre otros, que tengan precaución en la vía, sobre todo en las zonas donde inicie el contra flujo para realizar el paso del dique del embalse del Sisga. Además, recordaron que el cierre del puente será por 24 horas durante todos los días que dure la obra, por lo que el paso será obligado en contra flujo.
Finalmente, habitantes de todos los municipios que se conectan con Bogotá por esta importante vía mostraron su preocupación ya que diciembre es uno de los meses en los que más ingresos tienen, ya sea por los visitantes que van a ver los pesebres en los pueblos boyacenses o las familias que viajan al norte del país y transitan por esa vía. Por esto, piden que se evalúe la opción de aplazar el inicio de las obras para enero o febrero del próximo año, cuando pase la temporada decembrina.
