Durante un vuelo de EasyJet de Tenerife a Bristol, una pareja fue detenida por la policía luego de protagonizar un incidente que dejó a los pasajeros horrorizados, detalló The Sun. El hecho ocurrió el 3 de marzo, cuando Bradley Smith y Antonia Sullivan, de 22 y 20 años respectivamente, fueron sorprendidos realizando un acto sexual a bordo del avión, a pocos minutos del despegue, un hecho que captó la atención de toda la prensa del Reino Unido.
Comportamiento inapropiado
Según el testimonio de varios testigos, la pareja cubrió sus acciones bajo varias capas de abrigos. Smith fue escuchado pidiéndole a su pareja que le realizara un acto sexual, lo que fue presenciado por al menos tres pasajeros, incluido un menor de edad. Los testigos alertaron a la tripulación sobre el comportamiento inapropiado, lo que llevó a que el personal de vuelo interviniera y detuviera a la pareja.
Entre los testigos se encontraba una madre y su hija adolescente, quienes informaron que podían ver claramente lo que estaba sucediendo. El incidente provocó una queja inmediata, y la tripulación decidió informar a las autoridades, quienes esperaron a la pareja al aterrizar en Bristol.
Consecuencias legales
Ambos fueron arrestados y posteriormente llevados ante los tribunales, donde se declararon culpables de un cargo de ofensa a la decencia pública. El juez que dictó sentencia, Lynne Matthews, fue contundente al condenar la falta de respeto hacia los demás pasajeros, destacando que un niño fue testigo del incidente.
Smith fue condenado a cumplir 300 horas de trabajo comunitario, mientras que Sullivan, quien trabaja como cuidadora, recibió una sentencia de 270 horas. Además, ambos deberán pagar una compensación de £100 a cada uno de los tres testigos que presenciaron su conducta.
EasyJet confirmó que la policía intervino al aterrizar debido al comportamiento de los pasajeros, marcando otro incidente controversial a bordo de sus vuelos.
Este caso destaca la importancia del comportamiento adecuado en espacios públicos y las consecuencias legales que pueden surgir de conductas inapropiadas en lugares donde se comparte el espacio con otros, especialmente en situaciones de tanta cercanía como en un avión.
