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“La protesta social no es un crimen”: Petro celebró la decisión de la Fiscalía sobre las manifestaciones pacíficas

La nueva normativa, que consta de un documento de 25 páginas, se centra en garantizar y proteger el derecho a la protesta social pacífica.

En un reciente giro en la política de derechos humanos en Colombia, el presidente Gustavo Petro ha mostrado su apoyo a la nueva Directriz 0001 emitida por la Fiscalía General de la Nación. Esta normativa, que marca un cambio significativo en la forma en que se manejan las protestas pacíficas, ha sido recibida con gran entusiasmo por el jefe de Estado, quien ha resaltado su importancia para la protección del derecho a la protesta.

La Directriz 0001, anunciada por la fiscal general Luz Adriana Camargo el pasado 10 de septiembre, establece nuevas pautas para la intervención de la Fiscalía en las manifestaciones sociales. Esta normativa se enfoca en asegurar que las acciones de la Fiscalía respeten los derechos humanos y se alineen con las leyes vigentes, promoviendo una intervención más equilibrada y justa en el contexto de las protestas.

Gustavo Petro, a través de su cuenta de X, expresó su respaldo a esta medida. La protesta social no es un crimen. Bien por la Fiscalía. No más cárcel por protestar y pedir justicia”, escribió Petro, señalando su satisfacción con la nueva directriz que busca evitar la penalización de quienes ejercen su derecho a manifestarse pacíficamente.

¿Qué dice la nueva directriz de la Fiscalía sobre la protesta social?

La Directriz 0001 reemplaza las normas previas establecidas por el exfiscal Francisco Barbosa en junio de 2021, durante un período de intensas tensiones sociales y políticas en el país. Estas normas anteriores, que respondían al paro nacional de ese año, habían sido criticadas por su rigidez y las severas restricciones impuestas a los participantes en las protestas.

La nueva normativa, que consta de un documento de 25 páginas, se centra en garantizar y proteger el derecho a la protesta social pacífica. Sin embargo, también ha generado debates sobre sus implicaciones. Algunos críticos argumentan que la directriz otorga demasiada libertad a los manifestantes, permitiendo acciones que podrían afectar a la ciudadanía y facilitar bloqueos, así como ofrecer beneficios judiciales a quienes cometan delitos durante las protestas. Asimismo, la directriz elimina el delito de concierto para delinquir y permite expresiones de desacuerdo hacia las autoridades, lo que ha suscitado preocupaciones entre sectores que defienden la seguridad pública.

En respuesta a estas críticas, el exministro de Justicia Néstor Osuna elogió la medida, afirmando que “la Directriz 0001 de la Fiscalía vuelve al cauce del respeto al derecho fundamental a la protesta pacífica y evitará que se reincida en esas imputaciones infladas que se usaron durante el estallido social para encarcelar por años a cientos de jóvenes sin juicio ni condena”. Osuna destaca la importancia de la nueva directriz para asegurar una justicia que sea rigurosa pero no vengativa.

Petro, quien ha hecho de la liberación de los miembros de la primera línea capturados durante las protestas de 2021 una prioridad de su administración, ha reafirmado su compromiso con una política de justicia que no penalice de manera desproporcionada a los manifestantes. “He ordenado a toda la fuerza pública de Colombia no levantar jamás las armas mortales contra el pueblo”, subrayó el presidente, en un claro respaldo a la protección de los derechos de los ciudadanos durante las manifestaciones.

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