La tasa de desempleo en Colombia experimentó un leve aumento en julio de 2024, alcanzando el 9,9%, según el último informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE). Este incremento, aunque moderado en comparación con el año anterior, subraya los desafíos persistentes en el mercado laboral del país.
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El aumento de 0,3 puntos porcentuales desde el 9,6% registrado en julio de 2023 refleja una tendencia preocupante. Sin embargo, el panorama presenta una ligera mejoría en comparación con el mes anterior. La tasa de desempleo desestacionalizada, que ajusta las variaciones estacionales, mostró una disminución del 10,6% en junio al 10% en julio.
En términos absolutos, el país cuenta ahora con 2,5 millones de ciudadanos desempleados, 100,598 más que en el mismo mes del año pasado. El presidente de la Andi, Bruce Mac Master, destacó que este elevado número indica que el mercado laboral aún no ha logrado integrar a una parte significativa de los buscadores de empleo. Además, la alta tasa de informalidad sigue siendo una preocupación, afectando a más de la mitad de la población ocupada, quienes carecen de acceso a beneficios sociales y derechos laborales básicos.
La población ocupada en Colombia alcanzó los 23,2 millones en julio, un incremento de 0,1% respecto al total nacional. Con una población en edad de trabajar de 40,142,000 personas, el desafío de reducir el desempleo sigue siendo evidente. Las principales ciudades del país experimentaron un desempleo promedio del 10,2%, superior al 9,8% de julio de 2023.
La brecha de género en el desempleo es notable, con una tasa de desocupación del 12,9% para las mujeres, en comparación con el 7,7% para los hombres. Este desbalance subraya la creciente preocupación sobre cómo las mujeres están perdiendo terreno en el mercado laboral, un problema que podría estar afectando negativamente la estabilidad económica de los hogares.
En cuanto a sectores específicos, el informe muestra que la Administración Pública, Educación y Atención de la Salud Humana fueron los sectores que más contribuyeron al incremento de la población ocupada, con 164,000 nuevas posiciones. En contraste, las áreas de Construcción y Transporte y Almacenamiento vieron reducciones significativas en el empleo, con 119,000 y 113,000 puestos menos, respectivamente.
La crisis de empleo también se refleja en las tasas de desempleo por ciudad. Entre mayo y julio de 2024, Quibdó (26,8%), Riohacha (16,6%) e Ibagué (15,7%) registraron las tasas más altas, mientras que Bucaramanga (8,4%), Medellín (9,0%) y Santa Marta (9,1%) mostraron las menores.
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El desempleo juvenil es especialmente alarmante, con casi el 25% de los desempleados en el país pertenecientes al grupo de 15 a 24 años. Este grupo aumentó de 723,000 a 748,000 personas entre 2023 y 2024, destacando una creciente dificultad para los jóvenes en el mercado laboral.
Las mujeres enfrentan un panorama aún más complicado, perdiendo empleo en casi todos los grupos de edad analizados. En julio, 121,000 mujeres perdieron su empleo, en comparación con una reducción de 20,000 empleos entre los hombres.
El DANE señala que la tasa de participación laboral se situó en 64,2% en julio, con una tasa de ocupación de 57,8%. Estas cifras indican una ligera disminución en comparación con el año anterior, cuando las tasas eran de 64,8% y 58,6%, respectivamente.
La situación actual destaca la necesidad urgente de políticas efectivas para fomentar el crecimiento económico y generar más empleos de calidad. La Andi y economistas sugieren que un entorno económico estable y favorable, junto con incentivos para la inversión, podrían ser clave para mejorar las condiciones del mercado laboral en Colombia.
