Ubicada en Sesquilé, Cundinamarca, a solo 45 kilómetros al noreste de Bogotá, la planta de Central Cervecera de Colombia, inaugurada en 2019, se erige como la instalación más avanzada del país y una de las más innovadoras en Latinoamérica. Con una inversión inicial superior a 500 millones de dólares, esta planta tiene una capacidad anual de producción de 4 millones de hectolitros de cerveza y es responsable de más de 170 empleos directos en la región, beneficiando a más de 400 personas con empleos indirectos.
Desde su establecimiento en 2014, Central Cervecera de Colombia ha marcado una diferencia significativa en el sector cervecero colombiano. Esta compañía es el resultado de una colaboración estratégica entre Postobón, un gigante en bebidas no alcohólicas, y la Compañía Cervecerías Unidas (CCU) de Chile, reconocida por su liderazgo en el mercado cervecero chileno.
Central Cervecera no solo ha hecho avances en la producción, sino que también se ha comprometido con la inclusividad y la sustentabilidad. La planta ha sido diseñada para ser operada tanto por hombres como por mujeres, logrando que más del 30% de su personal operativo sean mujeres.
En términos de sostenibilidad, la planta utiliza más de 7,700 paneles solares instalados en un área de 55,000 metros cuadrados, cubriendo entre el 25% y el 30% de su demanda energética, mientras que el resto de la energía proviene de fuentes renovables certificadas.
Además, Central Cervecera ha implementado un sistema avanzado de recuperación de CO2 con una pureza mínima del 95%, que se purifica a un 99,9% para su uso en procesos internos. La planta también dispone de una moderna administración del agua, incluyendo una Planta de Tratamiento de Agua Potable (PTAP) y una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR), esta última equipada con un sistema de generación de biogás para reducir el consumo de gas natural y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Transformación el mercado cervecero en Colombia
La entrada de Central Cervecera en el mercado colombiano ha dinamizado un sector que históricamente había estado monopolizado. Desde su llegada, la competencia se ha intensificado, aumentando la variedad de productos y mejorando la experiencia tanto para consumidores como para minoristas. En 2019, se comercializaban en Colombia 25.5 millones de hectolitros de cerveza. Cinco años después, este número creció a 30.2 millones, con un incremento del 30% en el número de marcas y una oferta diversificada en más de 24 presentaciones diferentes.
El consumo per cápita ha alcanzado casi 60 litros anuales, consolidando a Colombia como el tercer país con mayor consumo de cerveza en Latinoamérica, solo detrás de México y Brasil. El mercado cervecero colombiano, valorado en aproximadamente 22 billones de pesos al año, ha visto un incremento notable en el recaudo de impuestos desde la entrada de Central Cervecera, con un aumento cercano al 95% en Cundinamarca desde 2014.
Marcas y expansión de la Central Cervecera
En sus primeros años, Central Cervecera lanzó seis marcas: Andina, Tecate, Natumalta, Heineken, Andina Light y Miler Lite. Posteriormente, expandió su portafolio con marcas como Central, Sol y Tres Cordilleras Rosada. En junio de 2024, lanzó Andina Refajo, una innovación que se destaca por ser el único refajo hecho con cerveza colombiana, consolidando su posición en el mercado como el auténtico refajo.
La marca insignia de Central Cervecera, Andina, junto con Heineken, ha sido un pilar importante en su portafolio, especialmente con el lanzamiento de productos adicionales como Tecate y Sol. Además, la cervecería ha revitalizado el segmento artesanal con la marca Tres Cordilleras, fundada por Juanchi Vélez en 1996, logrando multiplicar por cinco las ventas de esta marca tras su integración con Central Cervecera.
Con estos avances, Central Cervecera de Colombia no solo ha transformado el panorama cervecero en el país, sino que también ha establecido nuevos estándares en términos de innovación, sostenibilidad e inclusión en la industria.
Desarrollo de una cultura cervecera
Heineken, una de las marcas representadas por Central Cervecera, ha jugado un papel importante en el desarrollo de una cultura cervecera en Colombia. Con su estándar de alta calidad, ha establecido una referencia importante en el mercado, contribuyendo a la formación de una cultura cervecera de nivel mundial.
Felipe Mejía, gerente general de la compañía, expresa optimismo sobre el futuro: “La competencia ha revitalizado el sector, ofreciendo una mayor calidad y variedad. Estamos comprometidos a seguir promoviendo el crecimiento de la industria cervecera en Colombia y a maximizar los beneficios para todos los actores de la cadena.”
