En un insusual incidente que pone en tela de juicio la disciplina dentro de la Policía Nacional, cuatro patrulleros de la estación de Ciudad Bolívar, ubicada en el sur de Bogotá, han sido capturados por abandonar sus puestos de trabajo. El hecho, que ocurrió en la mañana de este viernes, ha desatado un debate sobre la responsabilidad de los uniformados y las consecuencias de sus acciones en la seguridad pública.
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A las 9:00 a.m. de este viernes, el subcomandante de la estación de Policía de Ciudad Bolívar ordenó una inspección sorpresa para verificar el paradero de los patrulleros asignados a los cuadrantes de seguridad de la zona. La misión era simple: confirmar que los oficiales estuvieran cumpliendo con sus deberes en el terreno. Sin embargo, lo que encontró el oficial encargado de la inspección fue una sorprendente muestra de negligencia: los cuatro patrulleros se encontraban disfrutando de un desayuno en un restaurante del sur de Bogotá, completamente ajenos a sus responsabilidades laborales.
El subcomandante había recibido informes sobre la posible inactividad de los oficiales y decidió enviar al oficial a investigar. Al llegar al lugar, el oficial observó que las patrullas a cargo de los patrulleros estaban estacionadas en la vía pública, una violación clara de los procedimientos establecidos. El hecho de que las patrullas estuvieran estacionadas en fila, sin ninguna señal de actividad policial, llevó al oficial a sospechar que algo estaba fuera de lugar.
Cuando el oficial se comunicó con los patrulleros a través de la radio, estos intentaron justificar su ausencia alegando que estaban “adelantando labores de apoyo en un procedimiento solicitado por el radio de comunicación”. Sin embargo, al no poder corroborar ninguna de sus afirmaciones y al encontrarlos en un lugar totalmente ajeno a sus funciones, el oficial determinó que se trataba de un claro caso de abandono de puesto.
La situación llevó a la inmediata captura de los cuatro patrulleros, quienes ahora enfrentan cargos por abandonar sus responsabilidades en un momento crítico. Este incidente ha generado una ola de críticas y reflexiones sobre la eficacia del sistema de vigilancia dentro de las fuerzas policiales de la ciudad.
El Comandante de la Policía de Bogotá ha señalado que este tipo de comportamientos no serán tolerados y que se tomarán medidas severas para asegurar que todos los miembros de la fuerza cumplan con sus deberes de manera ejemplar.
