En una investigación exclusiva, SEMANA llegó hasta Puerto Lleras para adentrarse en uno de los bienes menos conocidos de la exsenadora Piedad Córdoba: la Finca Hotel Agroecológica Ari Ari. Este predio de 144 hectáreas en los Llanos Orientales se encuentra bajo el escrutinio de la Corte Suprema de Justicia, que busca rastrear el origen de los fondos utilizados para su adquisición.
PUBLICIDAD
La incertidumbre sobre el futuro de la hacienda de Piedad Córdoba
Dos meses después del fallecimiento de Piedad Córdoba, la suerte de la Finca Hotel Agroecológica Ari Ari parece estar en un limbo. Ubicada en el Meta, este predio ha sido objeto de atención debido a las posibles conexiones financieras entre la exsenadora y Álex Saab, el testaferro de Nicolás Maduro. Con la muerte de Córdoba, muchas incógnitas rodean el destino de esta propiedad.
Un recorrido por la finca y sus desafíos
Con 144 hectáreas de extensión, la finca se encuentra en la vereda La Tigrera de Puerto Lleras, a dos horas de Villavicencio, en una región marcada por la presencia histórica de las Farc. A pesar de la aparente calma en la zona, la sombra del conflicto armado aún se cierne sobre la región.
De acuerdo a la revista Semana, para acceder a la propiedad, se debe tomar una carretera destapada y polvorienta, indicada solo por coordenadas específicas. Una vez dentro, se encuentran amplias casas y un complejo turístico imponente, que alguna vez fue conocido como Balcones. Sin embargo, la repentina muerte de Piedad Córdoba ha dejado en pausa los proyectos de la hacienda, incluida la construcción de una piscina, dejando incertidumbre sobre su futuro.
La gestión de la finca ha sido un desafío desde la muerte de la dirigente antioqueña. Aunque su familia conserva la propiedad, la incertidumbre sobre su destino persiste. Además, la posible intervención judicial en el caso agrega complejidad a la situación, especialmente en lo que respecta al origen de los fondos utilizados para su adquisición.
Con gallinas, marranos, pavos reales, caballos y vacas brahman y holstein, la finca demanda recursos económicos para su mantenimiento, recursos que en gran parte provenían de la exsenadora. Sin embargo, la ausencia de Piedad Córdoba ha dejado un vacío en la gestión de la hacienda, lo que ha llevado a la paralización de proyectos y la incertidumbre sobre su futuro.
Con múltiples intereses en juego, incluidos los hijos de Piedad Córdoba y las investigaciones judiciales en curso, el destino de la Finca Hotel Agroecológica Ari Ari sigue siendo incierto. Mientras tanto, la comunidad local observa con atención el desenlace de esta historia, que podría tener implicaciones significativas tanto a nivel judicial como en el legado de la exsenadora.
