Este 15 de febrero se conmemora el Día Mundial del Cáncer Infantil, una fecha que recuerda a los ciudadanos y autoridades que la enfermedad exige atención inmediata para que más niños puedan sobrevivir.
“Quiero ser grande” es una campaña que llega a su cuarto año y busca apoyar a los niños con cáncer y sus familiares bajo un concepto de servicio integral, pues esta iniciativa ha permitido la articulación de entidades de salud, fundaciones, ONG, entes gubernamentales del orden regional y nacional, empresas privadas, se unan solidamente y creen redes de apoyo.
“Nos unimos para construir una red integral de apoyo que abarque aspectos médicos, emocionales y educativos. Unidos, somos un faro de esperanza iluminando el camino hacia la curación y el bienestar infantil, construyendo puentes hacia un futuro más saludable y pleno de posibilidades”, aseguro María del Pilar Carbonell de la Fundación Divina Providencia.
También podría leer: Conoce a Cosimo Caiffa, creador de impresionantes ilusiones artísticas callejeras en 3D
La campaña “Quiero ser grande” busca que las cifras no sean solamente estadísticas, sino que vayan más allá y sea una señal de alerta que permita que los niños que padecen cáncer puedan recibir la atención oportuna y adecuada que requiere la enfermedad.
Cifras alarmantes
De acuerdo con la OMS, las cifras globales de cáncer infantil hablan aproximadamente de 300.000 niños menores de 19 años que han sido diagnosticados anualmente. Pese al avance médico, se siguen perdiendo 20% de la vida de los menores que si hubiesen sido detectados a tiempo, se hubiesen podido salvar.
Tipos de cáncer infantil
El 30% de los casos de cáncer infantil son por leucemia, la segunda causa más frecuente son los tumores cerebrales. El neuroblastoma y los linfomas se suman a la lista.
En la penumbra de la enfermedad, los tratamientos emergen como luces tenues de esperanza. Aunque la quimioterapia persiste como un pilar central, la Inmunoterapia y los tratamientos dirigidos se destacan como innovaciones prometedoras. Estas terapias no solo buscan tratar la enfermedad, sino hacerlo de manera más precisa y con menos efectos secundarios devastadores.
Señales de alerta
La detección temprana del cáncer salva vidas, es por eso que padres, cuidadores, profesionales de la salud deben prestar atención a los niños que hay alrededor e identificar las posibles señales de alerta.
La pérdida de peso inexplicada, moretones que desafían la lógica, dolores de cabeza persistentes, y cambios en la visión que son más que simples inconvenientes. En los tipos de cáncer más comunes, se presentan las siguientes señales:
Leucemia: Fatiga extrema, palidez y dolor óseo.
Tumores Cerebrales: Dolores de cabeza persistentes, vómitos sin causa aparente y cambios en la visión.
Neuroblastoma: Inflamación abdominal, pérdida de peso y cambios en el comportamiento.
Linfomas: Hinchazón de los ganglios linfáticos, fiebre inexplicada y pérdida de peso.
Gratuidad en el tratamiento de cáncer
Se reglamentó la Ley 1388 del 2010 que vela “por el derecho a la vida de los niños con cáncer en Colombia”. Optimiza los servicios, diagnóstico oportuno y referencia temprana, acceso al diagnóstico, creación de la red de atención de cáncer infantil y del registro nacional de cáncer infantil, así como al servicio de apoyo social del menor con cáncer.
Esta ley fue complementada con la Ley Jacobo (decreto 1389 de 2010), reglamentada según decreto 647 del 2022, que busca “priorizar el flujo de recursos a los prestadores de servicios de salud de menores de edad con presunción o diagnóstico confirmado de cáncer”.
Con esta ley lo que se busca es asegurar la continuidad financiera de las instituciones que atiendan a los niños con esta dolorosa enfermedad.
Lea también: Mujer hizo señal de ayuda y logró salvar su vida: había sido agredida por su pareja con arma blanca
Adicionalmente este mismo decreto de reglamentación señala que la atención en oncología pediátrica será integral, prioritaria y continuada, esta última en relación a que se dé sin dilaciones y demoras o barreras de cualquier tipo.
Un llamado urgente a la acción
El cáncer infantil exige más que simpatía; exige acción. Cada niño que pierde la vida a causa del cáncer no es solo un número, sino una llamada urgente a cambiar la estrategia para lidiar con la enfermedad.
La conciencia pública debe traducirse en medidas tangibles: financiamiento para investigación, apoyo a las familias afectadas y una educación masiva sobre las señales de alerta.
Lea más: Así viajaron más de 52 mil toneladas de flores colombianas para los enamorados de todo el mundo
La lucha contra el cáncer infantil no es solo responsabilidad de los expertos médicos, sino de toda la sociedad. El tiempo para la acción es ahora, porque cada día que perdemos es un día que el cáncer infantil gana terreno.