El 17 de agosto, a medio día, se registró un temblor de 6.1 que tuvo como epicentro el Meta, y generó afectaciones en varias partes de Cundinamarca, vías y casas, además del susto que se llevaron muchas personas, incluso causándoles desmayos. Lo cierto es que al parecer, instituciones educativas también tomaron medidas respecto al temblor que se presentó en Colombia.
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Estudiantes de la Universidad Distrital de Colombia aseguraron que por medio de un mensaje les informaron que era necesario cancelar las clases hasta tener certeza completa del bienestar de todos. Ante esto, estudiantes de dicha universidad que tienen que estar presentes en la sede de Bosa, Macarena y calle 40, tuvieron que salir del edificio hasta nuevo aviso.
La misma fuente aseguró que en la sede de Macarena hay un edificio que no cuenta con sistema antisísmico, por lo que el susto fue aún mayor.
Por información revelada, no hay heridos o personas afectadas.
Según la sede de Bosa, a las 2:30 revaluarían la situación para poder retomar clases.