Colombia está a punto de presenciar un momento histórico este jueves 15 de junio, día en que se lleva a cabo el último debate en el Senado de la República en donde se discutirá si finalmente el cannabis pasará a ser regulado en Colombia o seguirá bajo las políticas de la prohibición. El expresidente Juan Manuel Santos se pronunció sobre este tema y suplicó al Congreso que apruebe la regulación.
“Colombia debe regular el cannabis de uso adulto para quitarle la renta a las mafias, mejorar la salud pública y crear empleo. El mundo se mueve en esa dirección”, fueron las palabras del expresidente. Además, el exmandatario explicó por medio de un video a la opinión pública que “es el momento oportuno para pedirles a congresistas que voten positivamente la regulación del cannabis. Llevamos demasiado tiempo sufriendo la prohibición, porque lo único que ha hecho es generar más violencia y no ha sido capaz de controlar el consumo o controlar el tráfico”.
El expresidente insiste en que es necesario avanzar en la regulación porque el mundo se mueve en esa dirección y que es necesario “dar ese paso para regular el mercado y mitigar los efectos nefastos del narcotráfico de Colombia”.
Nuevo intento por regular el cannabis en Colombia
Ya varias veces en el Congreso de la República se han presentado proyectos de Ley que buscan la regularización del cannabis y este esfuerzo ha fallado en reiteradas ocasiones. La Plenaria en Senado que se llevará a cabo este jueves y discutirá por última vez el proyecto que busca la regularización con el representante Juan Carlos Losada Vargas como coordinador de los ponentes.
¿Qué busca el proyecto?
El Proyecto de Ley tiene como objeto permitir la regularización del uso del cannabis por parte de mayores de edad, así como la unificación de la normativa actual respecto a la utilización del cannabis para uso científico, siempre y cuando se cumplan los requerimientos establecidos. Esto con el objetivo de reconocer y garantizar los derechos fundamentales a la igualdad y al libre desarrollo de la personalidad, unificar las referencias constitucionales, legales y jurisprudenciales sobre el uso del cannabis y plantear una estrategia distinta para combatir el tráfico ilegal, para poder mitigar la violencia que se genera al rededor de esta sustancia.
La discusión sobre el cannabis
José Miguel Quintana, activista pro cannabis, señala que es necesario que el Estado separe la marihuana de otras sustancias psicoactivas para hacer un tratamiento adecuado en el ámbito legislativo, pues es simplemente una planta, como el café. Otras sustancias pasan por procesos químicos y Quintana asegura que la marihuana simplemente es la planta, cultivada como otras, que se consume naturalmente.
“Los marihuaneros estamos haciendo nuestras leyes. En ningún momento dije que íbamos a hacer todas las leyes”, también aseguró el activista, que también sugirió que el consumo de marihuana es como el consumo de azúcar o de café, pues se da por gusto y no genera efectos tan nocivos para la salud como el alcohol o el tabaco.
De igual forma, la senadora del Centro Democrático, Paloma Valencia, también fue enfática en que promover el uso de marihuana desde jóvenes provoca un mayor riesgo de trastornos psiquiátricos. “Cuando se legaliza o cuando la gente empieza a consumir cannabis joven, hay un aumento significativo de trastornos psiquiátricos, suicidios y hospitalizaciones. Esto no es consumirse una marihuana para estar mejor, es que esto ya está probado científicamente”, señala la congresista.
“La marihuana genera un efecto de relajación, desarrolla la creatividad, sencillamente es un gusto que un grupo poblacional tiene (...) Detrás de la planta de cannabis hay mucho más que un grupo de marihuaneros”, dijo. Además, el activista pro-cannabis aclaró que por querer la libertad de utilizar la marihuana no significa que estén promoviendo el consumo en menores de edad o promover el consumo de la planta en colegios o lugares públicos.
Por su parte, la senadora del partido de Gobierno, Pacto Histórico, María José Pizarro, argumentó que hay sustancias mucho más nocivas que la marihuana, como lo son el licor y el cigarrillo, y que esta genera consumos problemáticos en un porcentaje mucho menor en las personas que la consumen. “En una escala de cero a 100, el alcohol es 72 veces más dañino, el cigarrillo 26 veces más dañino frente al cannabis que estaría en esta escala en el número 20 y si nosotros hablamos de la afectación a los usuarios, la marihuana es 100 veces menos peligrosa y menos adictiva y solamente genera un consumo problemático en el 10% de las personas que la consumen”, argumentó la senadora al respecto.