La aerolínea Viva Air recibió un salvavidas por parte de la Aeronáutica Civil tras la aprobación de su unión con la aerolínea Avianca, con algunos condicionamientos. Sin embargo, la compañía sigue lidiando con un proceso en el que el Gobierno la acusa acusa por las afectaciones a pasajeros con su cese de operaciones del pasado 27 de febrero.
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Tras el cese de los vuelos de Viva Air en el mes de febrero, muchos pasajeros resultaron afectados y la crisis en los aeropuertos a nivel nacional fue masiva. Aún las aerolíneas como Avianca y Latam siguen ofreciendo tarifas preferenciales para personas afectadas, pero la pregunta sigue retumbando en la mente de muchos: ¿Por qué siguieron vendiendo tiquetes a pesar de que sabían de su difícil situación económica?
En medio de este proceso la aerolínea ha sido enfática en que hay pruebas claves en el celular del ministro de Transporte, Guillermo Reyes. La compañía solicitó formalmente a la Fiscalía General de la Nación que se haga una inspección a los archivos del teléfono móvil.
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Viva asegura que en el teléfono está el motivo de por qué la aerolínea decidió seguir vendiendo tiquetes a pesar de haber reportado su difícil situación económica meses atrás de la suspensión de sus operaciones.
Al parecer, la aerolínea habría confiado en la palabra del ministro Reyes, pues hubo comunicaciones de este con Félix Anton y Francisco Lalinde, los dos últimos directores ejecutivos de la Viva. A pesar de que existe la evidencia en los celulares de los ejecutivos, solicitan que se restringa el uso del móvil al ministro para poder retener estas pruebas.
Al parecer, y según afirma el periodista Daniel Coronell, pese a que el ministro conocía la difícil situación económica en la que estaba la compañía, habría dado un parte de tranquilidad en que aprobaría la unión con Avianca y por esto la aerolínea decidió seguir vendiendo tiquetes.
