El inicio de la última semana completa de noviembre se ve marcado por el comienzo de negociaciones del Gobierno de Gustavo Petro con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), la que ahora porta el título de guerrilla activa más antigua en Colombia.
Los diálogos se llevarán a cabo en la capital del vecino país de Venezuela, Caracas y la mesa de diálogo estará integrada por varias personas que incluso hacen parte de sectores opositores al gobierno del actual presidente, como José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán y esposo de la senadora del Centro Democrático, María Fernanda Cabal.
Por ahora, y desde el espacio que se abrió este lunes, los temas principales a tratar serán la definición de la hoja de ruta. Es decir, los procedimientos y la metodología que tendrán los delegados allí, en el Hotel Humbolt, en la cima del Cerro El Ávila, a las afueras de Caracas, un lugar que por su tranquilidad y lejanía del centro urbano, se plantea como el escenario adecuado para el diálogo.
¿La quinta es la vencida?
Con esta se completan cinco ocasiones en las que esta guerrilla toma espacio para negociar con el Gobierno colombiano tras 60 años de existencia y acciones armadas. El visto bueno del alto comisionado para la paz, Danilo Rueda y el jefe de negociación del ELN, Pablo Beltrán, este lunes se instaló el acto protocolario y la mesa de diálogos que buscaría acercar cada vez más al país a la ‘paz total’ que ha promovido el mandatario Gustavo Petro.
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El ELN es hasta ahora la guerrilla más destacada dentro de la lista de organizaciones que se han dispuesto a negociar con el Gobierno, pues se han instaurado ya cuatro mesas de diálogo en donde se han roto relaciones, como en la última ocasión, cuando el expresidente Iván Duque levantó la mesa tras el atentado a la escuela de cadetes General Santander.
Aunque la participación de Venezuela en este diálogo ha sido internacionalmente criticada, el Gobierno colombiano se ha asegurado de conseguir el aval de otros actores como garantes, tales como Cuba y Noruega, además de los presidente Gabriel Boric y el de España, Pedro Sánchez. Adicionalmente, los veedores internacionales serán un enviado del secretario general de Naciones Unidas y de la Conferencia Episcopal colombiana.
Dentro de las novedades también se encuentra que la presidenta de la Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (ACOPI), Rosmery Quintero, consolidando la diversidad de la mesa, juntando a expertos en derechos humanos, género, comunidades étnicas, entre otros. Con los actores anunciados se espera que diferentes sectores de la sociedad colombiana sean escuchados en el ‘tira y jala’ que sucederá en la capital venezolana durante los próximos meses.
¿Cómo van las Fuerzas Militares?
El gobierno había sido altamente criticado por que aún hasta el pasado domingo no había una silla en la lista de negociadores para las Fuerzas Militares, quienes finalmente han enfrentado a la guerrilla a lo largo de la historia colombiana. Sin embargo, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, anunció al enlace con su cartera, el mayor general del Ejército Hugo Alejandro López Barreto, quien sería el único militar activo que participaría en la mesa.
Los demás militares, en retiro y activos, que el ministro ha mencionado como presentes en el espacio asisten en calidad de asesores y no gozarían de la palabra y voto que tendría en su potestad el general López.
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Las complejidades
Es de anotar que la guerrilla del ELN se ha caracterizado por ser un grupo armado de carácter federalista, por lo que no obedecen a un solo mando, sino que tienen varias líneas dirigentes que definen sus decisiones y acciones por cuenta propia. Esto ha hecho que sea más complejo realizar unos diálogos que concluyan en un acuerdo, esto evidenciado que cuatro intentos han resultado fallidos. De hecho, el corte federalista ha hecho dudar el jefe negociador, Pablo Beltrán, sobre si todas las estructuras tendrían la misma voluntad de paz, para no concluir en un problema de disidencias, como pasó con la antigua guerrilla de las Farc, lo que estará por verse a lo largo de las conversaciones.
Las acciones armadas que siguen activas de ambos bandos parecen ser la piedra angular de la tensión que se manejará en estas conversaciones. El ministro de Defensa, Iván Velásquez, confirmó que las operaciones contra este grupo armado siguen activas y que las órdenes de captura en contra de sus integrantes siguen en pie, a menos de que hagan parte de la lista exceptuada de la mesa de diálogo.
“No hay ahora alguna suspensión, o actividades, estamos naturalmente en la observación de estas conversaciones, en la comunicación permanente que mantenemos con el comisionado para la paz, tomar las decisiones en su momento, con la evolución con esos diálogos”, confirmó el funcionario al respecto.