En el Foro ‘Latinoamérica, Estados Unidos y España en la Economía Global’, organizado por el diario El País de España, en el marco de la 77 Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el presidente Gustavo Petro aseguró que en el tiempo que lleva en el Gobierno ha logrado que en Colombia se haya “cambiado el lenguaje de la polarización, creo que es uno de los hechos importantes”.
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En su diálogo con Jan Martínez Ahrens, Director de El País-América, el mandatario explicó que “el simple hecho de entrevistarme con (Álvaro) Uribe, con ciertas figuras que son de la oposición, pero que venían gobernando el país, le quitó esa pugnacidad a la política colombiana, por lo menos durante los próximos meses”.
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Para el presidente, esto representa un avance importante, en la medida en que se puede hacer una construcción de país “a pesar de las diferencias”, debido a que “Colombia es un país cuya historia muestra cómo del sectarismo político se pasa fácilmente al genocidio, y eso es un lujo que no nos podemos dar”.
Y agregó que, si bien en otros países la pugna política puede ser más tolerada, en Colombia “el gobernante tiene que tener mucho cuidado en cada palabra, porque allí sí que cada palabra puede es desencadenar los gatillos”.
Destacó que en el tiempo que lleva de Gobierno se ha logrado ampliar el apoyo en lo social y lo político, a pesar de la polarización que se evidenció en la campaña, que derivó en que la sociedad se dividiera entre quienes querían “mantener las cosas como estaban, y el otro queriendo ya un cambio”.
“Hoy por hoy tenemos un mayor margen de maniobra. ¿Cuánto durará? No mucho, pero tenemos un mayor margen de maniobra en el Congreso; se esperaba que iba a haber una fuerte oposición. En la sociedad hemos llegado a niveles del 70% de favorabilidad, es decir, hemos captado buena parte del espacio que votó en contra”, anotó.
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Al referirse a su equipo ministerial, dijo que “el Gobierno no es homogéneo políticamente” y explicó que hay dos grandes vertientes: “La mitad del gabinete de extracción liberal y la otra mitad del gabinete es progresista”.
En este sentido, manifestó que es un Gobierno plural, que “no tiene una narrativa, tiene una diversidad”.