En Bogotá es común que un paseo a la Plaza de Bolívar sea antecedido por el tradicional ‘septimazo’, el cual los presidentes de Bolivia y Chile no dudaron en realizar para llegar a la posesión del presidente Gustavo Petro.
El ‘septimazo’, la tradicional caminata por la Carrera Séptima de Bogotá que va a acompañada por cultura, comercio y comida, es habitual en los habitantes de la capital. Gabriel Boric y Luis Arce, presidentes de Chile y Bolivia se dieron el tradicional paseo por el centro de la ciudad antes de asistir como invitados de honor a la ceremonia de transmisión de mando que posiciona al presidente electo por los colombianos y colombianas.
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En varios videos los mandatarios de los países vecinos latinoamericanos fueron vistos caminando tranquilamente por la Carrera Séptima. Custodiados por varios guardias y Policía Nacional colombiana, se vieron caminando y charlando por la importante vía arteria de la ciudad, justo antes de llegar a la Plaza de Bolívar, en donde luego se sentaron en tarima como invitados de honor, para ver de cerca la llegada del primer presidente de izquierda de Colombia.
Minutos después, a Gabriel Boric, reciente presidente electo de Chile, se le vio saludando efusivamente al nuevo mandatario en la tarima a la cual llegó tras caminar con su familia por la calle contigua a la Plaza de Bolívar.
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La primera orden de Petro como presidente
El electo Gustavo Petro ya es oficialmente el presidente de la República de Colombia y contrario a lo que muchos pensaron su primera orden fue sencilla, hacer traer la espada de Bolívar, la misma que horas atrás le negó el presidente saliente Iván Duque.
Tras la imposición de la banda presidencial, Gustavo Petro no titubeó ni un segundo y ordenó a las Fuerzas Militares que le trajeran la espada de Bolívar, para realizar el acto simbólico que representa un cambio y la lucha contra la pobreza y la desigualdad.
Cabe mencionar que Iván Duque, presidente saliente, había impedido que este acto se realizara, pues consideró que por seguridad la mítica espada de Bolívar no podía salir de la Casa de Nariño.
