A pesar de los más de 50 años de conflicto armado interno, Colombia no está condenada a la guerra. La Comisión de la Verdad nació para darle cumplimiento al punto referente a las víctimas en el Acuerdo de Paz firmado entre el Gobierno Nacional y las FARC-EP, y su Informe Final persigue el objetivo de generar una conversación nacional para que como sociedad se pueda entender por qué ocurrió el conflicto armado, qué debe pasar para que estas dinámicas de violencia no se repitan, así como contribuir a resarcir el derecho a la verdad de las víctimas. Hay que tener en cuenta que la Comisión de la Verdad no es un mecanismo judicial, a diferencia de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Es decir, no juzga, ni condena a nadie.
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La presentación del Informe se realizo el pasado martes 28 de junio en un acto público a las 11:00 a.m. (hora colombiana), en el teatro Jorge Eliécer Gaitán de la ciudad de Bogotá, y fue transmitido a través de canales de televisión y plataformas digitales, tanto de la Comisión de la Verdad como de otras organizaciones y medios de comunicación. En este espacio, Francisco de Roux, presidente de la Comisión, hizo la lectura de la declaración o manifiesto, que es en síntesis el mensaje que la entidad dejará a la sociedad colombiana en perspectiva de transformación.
Luego del acto central de presentación del Informe Final, la Comisión estará presente en más de 50 espacios durante dos meses, julio y agosto, para socializar su Informe y promover la conversación dentro y fuera de Colombia con diversos sectores, gobiernos y entidades multilaterales, con el fin de que el legado de la Comisión comience a ser apropiado por la ciudadanía nacional e internacional.
Hasta junio de 2022, la Comisión realizó 14.918 entrevistas individuales y colectivas que permitieron escuchar a 28.543 personas. Además, como contribución al esclarecimiento de diversas personas, organizaciones, entidades públicas y privadas, se recibieron 730 casos y 1.195 informes sobre hechos de violencia relacionados con el conflicto armado.
El legado está representado en: el Informe Final, la transmedia digital (una plataforma de libre acceso que alojará el proceso de la Comisión, los testimonios y material del esclarecimiento disponible en diversos formatos: comisiondelaverdad.co), la transmedia análoga (activaciones académicas, culturales y artísticas), el archivo de derechos humanos que deja el trabajo de la Comisión, el Comité de Monitoreo y Seguimiento que velará durante siete años por que se hagan efectivas las recomendaciones del Informe Final, y la presencia de los resultados de la Comisión en el Museo de Memoria de Colombia.
Los más de 3.400 aliados que tiene la Comisión y la comunidad internacional serán de suma importancia para mantener vivo el legado, pues su rol será el de asumir como agenda propia las reflexiones y recomendaciones, para que los procesos de convivencia y reconocimiento que tuvo la Comisión en su mandato se fortalezcan.