En medio de la campaña electoral por las elecciones presidenciales en segunda vuelta, en donde se enfrentan Gustavo Petro y Rodolfo Hernández, se conocen revelaciones polémicas, como las últimas publicadas por la Revista Semana. La Fundación para la Libertad de Prensa hizo un llamado de atención sobre las estigmatizaciones de las que ha sido víctima este medio.
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Las últimas grabaciones filtradas por ese medio muestran la campaña sucia que habría promovido el Pacto Histórico en contra de figuras políticas como Sergio Fajardo, Alejandro Gaviria y Federico Gutiérrez. La Revista Semana ha estado en constante tensión con la audiencia debido a esto, y la FLIP resaltó varios señalamientos que son estigmatizantes para el medio.
“Luego de que @RevistaSemana publicara unas grabaciones que involucran a la campaña del @PactoHistorico, figuras políticas han emitido mensajes que buscan sembrar duda sobre la legalidad de la publicación y estigmatizan al medio”, comunicó la entidad defensora de la prensa en Colombia.
Además, hizo alusión a las declaraciones del senador Roy Barreras, en donde afirma que la revelación de las grabaciones representa una acto de espionaje ilegal y son un delito. “Solicito a la @revistasemana suspenda la utilización del material producto de un delito y su participación activa en la difusión del resultado de ese espionaje ilegal”, dijo el senador.
De igual forma, la FLIP acusa al candidato presidencial Gustavo Petro y el representante a la Cámara Inti Asprilla de emitir afirmaciones sin pruebas. “Esta desesperada la revista Semana con el ascenso en nuestras encuestas. Están publicando simplemente la evidencia que nos grabaron ilegalmente. ¿Quienes? Los mismos que le entregaron grabaciones: El gobierno. Un Watergate que debe ser investigado por una comisión independiente”, fueron algunas de las declaraciones de Petro sobre el escándalo.
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Al respecto, la Fundación aclaró que publicar las grabaciones no es un delito y que esto constituye un ejercicio periodístico legítimo. “Los medios no tienen fuentes de información prohibidas y sugerir la eliminación del material, como lo hizo Barreras, constituye un acto de censura”, explicó.
“Afirmar que un medio hace ciertas publicaciones bajo intereses políticos, como lo afirmaron Petro y Asprilla, es una estigmatización que alimenta la hostilidad contra la prensa que se ha intensificado en las #elecciones”, agregó la entidad.
Para concluir, la FLIP comentó que este año la entidad ha registrado 42 agresiones a periodistas que están relacionadas con el cubrimiento electoral y que han hecho de este el periodo más violento de última década.