El jueves 31 de marzo, se realizó la audiencia en contra de Cristian Alejandro Ospina Fernández, quien la Fiscalía General de la Nación lo presentó como autor material. Sin embargo no lo halló culpable en el delito de feminicidio y le imputó el cargo de homicidio agravado, por la muerte de la joven Yenny Karolay Nohava Forero.
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Durante el proceso, la jueza segunda promiscua de Circasia, Quindío legalizó la captura de Ospina luego de evidenciar que se había cumplido con darle a conocer sus derechos: tener un abogado de confianza, llamada a un familiar y el buen trato por parte de las autoridades. A lo que la defensa no apeló.
El fiscal 19 seccional también solicitó a la jueza que la siguiente audiencia de medida de aseguramiento y formulación de imputación de cargos- que se espera se desarrolle el próximo 4 y 5 de abril- no asistan los medios de comunicación, argumentando salvaguardar el material probatorio por parte de una testigo menor de edad que se encuentra embarazada.
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La necropsia realizada por Medicina Legal descartó que Yenny Nohava, haya sido abusada sexualmente. Y según las pruebas recopiladas por el grupo especial de la Seccional de Investigación Criminal, Sijín; el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI; y una de las Fiscalías especializadas de la Unidad de Vida del Quindío, descartaron que el motivo del asesinato haya sido por hurto o tráfico de estupefacientes.
¿Cómo sucedieron los hechos?
El 11 de marzo de 2022, Yenny Karolay Nohava Forero, de 20 años salió en la mañana de su casa para pasear a sus perros, pero estos regresaron a la casa solos. Y fue en ese momento que los familiares la reportaron como desaparecida.
Horas después encontraron su cuerpo boca abajo en un abismo de 30 metros de profundidad, al lado de una vía en el sector del cañón del río El Roble, en Circasia, Quindío. Luego del hallazgo se confirmo que fue asesinada con un arma blanca.
Yenny cursaba séptimo semestre de Derecho en la Universidad La Gran Colombia, de Armenia y le gustaba cantar, con un gran talento, canciones como “Fuentes de Ortiz de Ed Maverick”. Vecinos la recuerdan como una persona alegre y sin ningun rencor contra nadie.