PUBLIMETRO habló con el candidato a la presidencia Rodolfo Hernández, ingeniero civil y exalcalde de Bucaramanga desde 2016 hasta su suspensión y posterior renuncia en 2019. Reconocido en Santander como “el ingeniero del pueblo” afirma que nació como un político independiente y que seguirá en su ley, sin buscar coaliciones o alianzas políticas, porque apela a que quiere conquistar a ese votante indeciso que desea un cambio drástico para el país.

¿Considera que su paso por la Alcaldía de Bucaramanga le dio la experiencia para llegar a la presidencia de la República?

Yo me postulé a la Alcaldía el 16 de marzo de 2013 y empecé a hacer una campaña que fue en contravía de todo lo que hacen los políticos tradicionales. Ellos usan vallas, tejas, ladrillos, cemento, tamal, lechona, cerveza, plata, cantantes, buses, gritos, luces, cámaras, pólvora y todo eso. Nosotros usamos cero de todo eso, porque para esas campañas se necesitan cantidades enormes de dinero y ¿de dónde sale ese dinero para hacer las campañas? para las alcaldías, las gobernaciones y la presidencia, pues de la plata que le roban a la ciudadanía. El treinta por ciento de la plata que se roban es para hacer campaña, para volverse a reelegir, para seguir robando. El otro setenta por ciento va para el patrimonio de los ladrones. Nosotros quisimos hacer una campaña totalmente diferente basada en las emociones porque como candidato íbamos a gobernar con lógica, con ética  y con estética y poniendo al diseño como el humanismo del futuro, porque el diseño es vehículo de comunicación. Con esa metodología ganamos la Alcaldía. Nunca pusimos una valla ni un pasacalle. No entregamos tamales ni tejas ni ladrillos ni lechona ni plata ni nada, porque era una campaña de emociones. La gente creyó en que tenía la capacidad, el temperamento y las características para liderar y votaron por eso sorpresivamente derrotando en Bucaramanga a la maquinaria política más perversa, corrompida, ladrona, atracadora, manipuladora e hipócrita de Colombia. Todo eso no estaba en la Costa como creen estaba en Bucaramanga. Todo lo que prometimos en la campaña lo cumplimos. Todo es todo y con creces. Bucaramanga quedó como el único municipio de Colombia con cero déficit fiscal. Hicimos 503 obras. Dejamos saldando 42 obras. Dejamos cien mil millones en los bancos, después de que me entregaron todo saqueado. Racionalizamos la burocracia en la administración pública y la reducimos a términos racionales. Esa Alcaldía corta de 44 meses y 16 días, porque no me dejaron terminar, nos sirvió hoy de apoyo para estarle diciendo a los colombianos: “miren Rodolfo Hernández ha hecho en la vida privada esto y en la vida pública esto” y esto es lo queremos implantar en Colombia. No es un cambio de presidente, es un cambio de modelo donde primero están los pobres, porque un país rico, es un país sin pobres. Todo esto sin violencia y utilizando los mecanismos democráticos.

¿Cómo plantea su programa de gobierno para el país?

Colombia está herida de muerte, se están robando todo a toneladas y hay que quitarle la chequera  a la ladronera. Se están robando cien millones de pesos por minuto. ¿Qué es lo que hay que hacer? Primero estabilizar a Colombia ¿Cómo la estabilizamos? Quitándole la chequera a toda esa ladronera que tiene las arcas del país y ¿Cómo le quitamos la chequera? ¡Pues quitándosela! a través de un decreto ejecutivo que diga “el presidente de la República en uso de sus facultades que le confiere la Constitución Nacional decreta: primero: suspéndase los giros de particulares con el Estado” etc. Esto hasta que no tengamos una base de datos. Hay que estabilizar al país. Tenemos que saber que un metro cúbico de concreto que lo están cobrando, algunos contratistas, a un millón de pesos y vale doscientos cincuenta mil pesos y están cobrando casi cuatro veces más, ósea se están robando todo. Una vez tengamos organizado eso empezamos a abrir las compuertas, pero con una base de datos. De la misma forma vamos a esculcar a todos los funcionarios públicos, que son responsables y cómplices de todo el desfalco que ha hecho la ladronera, robándose los dineros públicos. Con los funcionarios de la Fiscalía, la Procuraduría y la Contraloría. Cuando eso se hace se comienza a sentir algo se llama miedo, porque el gobierno debe mandar con el ejemplo. Si ven que el presidente permite robar, todo el mundo roba y eso es lo que está pasando con Duque. Todo el mundo siente que en Colombia es permitido robarse la platica de los colombianos y Duque no dice nada. Nadie duda que sea un hombre honrado, pero permite el robo y para mí se convierte en cómplice. ¿Por qué en Colombia roban tanto? Pues porque aquí no hay justicia ni un sistema judicial eficiente. El sesenta por ciento son denuncias sin pruebas y el cuarenta por ciento restante son denuncias que están en proceso. Solo el 3 por ciento tienen una sentencia. Como no hay justicia los ladrones dicen: “hay un 98 por ciento de que no me pase nada y un tres por ciento de que me pase algo entonces me arriesgo”. Compran al juez, sobornan, amenazan, hacen hasta para vender y no pasa nada.

¿Cree habrá un cambio político que se refleje en las urnas en las próximas elecciones?

La gente está recontra mamada de eso y de que el presidente de la República no actué con la celeridad que debe actuar, y yo no me voy a convertir en tapadera de nadie. El cambio es para ya ¿Cuántos funcionarios tiene la Fiscalía?  Son como 45 mil ¿Cuántos funcionarios tiene la Contraloría? 10 mil ¿Cuántos funcionarios tiene la Procuraduría? 10 mil y ¿Cuántos funcionarios tiene el aparato judicial? 80 mil y no producen sino el tres por ciento de las sentencias. Es un aparato costosísimo que nos cuesta a todos y que nadie corrige. Esa debe ser la labor del presidente de la República. Luego que Colombia se estabilice y esté la plata empezamos a actuar rapidito donde es sensible. Para generar empleo y que haya bienestar, producción, felicidad y transformación en el esquema que vamos a hacer.

¿A qué votante busca Rodolfo Hernández llegar con sus propuestas?

Hay una reflexión que tenemos que hacer todos los colombianos. El cincuenta por ciento del censo electoral no vota en Colombia. El cincuenta por ciento de la capacidad que tienen los colombianos de que se expresen en las urnas: no vota. Y me puse a pensar ¿por qué no votan? Y mi respuesta es que la gente tiene metido en la cabeza que las elecciones previamente están diseñadas para que todo siga, independientemente de que cambian algunos actores. Entonces la gente dice: “para qué pierdo el tiempo, si todo sigue igual”, porque los que participan son los mismos ladrones de siempre o recomendados de los mismos ladrones de siempre y el resultado es el mismo. Por eso estoy invitando a ese cincuenta por ciento, que son más de 15 millones de colombianos a que con esos votos elijan al próximo presidente de la República de este país que vaya a cambiar esas estructuras administrativas, de pensamiento, de acción, de tener un presupuesto que incluya a la gran masa de colombianos que históricamente están abandonados. Por eso aprovecho para hacer un llamado a toda la gente que no vota a que vote, que no le deje eso a los politiqueros de siempre, a los mismos ladrones. Que si ellos se unen y escogen a un candidato, el que quieran, pongo mi hoja de vida, mi trabajo, mi dedicación, mi experiencia, mi tiempo, todo para poder servir. Si ellos creen que yo no merezco esa confianza, que voten por otro, a ver si cambiamos esta manera de ir a las urnas de estos politiqueros, que les roban la plata a los más pobres para comprar votos y luego los traicionan. Hay que cambiar, pero la única manera de cambiar es votando ¡Voten!