En redes sociales una usuaria de la plataforma de Rappi, ha denunciado que ha sido víctima junto a su novio, de robo por parte de un trabajador de la aplicación denominado como rappitendero.
El hecho sucedió según la mujer, luego de que su pareja dejara el celular en su vivienda, por tal motivo decidieron enviar el teléfono a través de esta aplicación en la opción Rappifavor.
“Rappi se convirtió en la plataforma de robos más legal en Medellín”, empieza hablando la joven de nombre Alejandra Ramírez, quien añade:
“Obviamente teníamos en cuenta que era un celular, que era delicado, por eso lo aseguramos supercaro en rápido, se pagó una póliza y se pidió el servicio”, describe la mujer.
La denunciante asegura que una vez llegó el rappitendero, le entregó el celular en un estuche de gafas que estaba metido en una caja de zapatos, con el objetivo de no mostrar que se trataba de un celular de alto valor, además lo interrogó con el objetivo de verificar si era realmente era un trabajador de la plataforma.
“Le entregué el producto, pero cinco minutos después el tipo empezó a ir para otro lado, a los lados de Moravia, de Campo Valdes. Mi novio me dijo: “se robaron el celular”. Le hablamos a soporte y soporte bloqueó, no podíamos hacer nada”, señala la víctima de robo.
Reglón seguido, la mujer añade que la misma plataforma le cambió el Rappi, porque el presunto ladrón había cancelado, en la aplicación aparecía como si no hubiera recogido nada.
“El equipo aparece todavía en Moravia, llamamos a la policía, ellos dicen que no pueden responder por eso, no nos pueden acompañar. El rappitendero ahora nos está extorsionando para entregarnos el celular, tenemos que entregarle plata anticipada e ir por el teléfono donde él quiera”, detalla la joven.
Según la denuncia, no es la primera vez que les pasa, ya que semanas anteriores también les iban a robar un medicamento según la mujer, de alto valor. En esa ocasión la Superintendencia fue quien hizo que la aplicación devolviera el producto.
Por el momento Rappi no responde ante la denuncia pública de esta mujer, pero se suma a varias modalidades que han quedado al descubierto.
