Maximiliano murió de la manera más atroz que se podría imaginar, a sus ocho años su mamá, su padrastro y su abuela lo asesinaron en medio de un ritual satánico para ubicar una guaca de oro, una historia espeluznante que conmocionó a Antioquia y al país. Este 17 de octubre, se conoció que dos de los integrantes de la secta satánica que hacía sacrificios para encontrar el metal precioso, fueron condenados.
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De acuerdo con Blu Radio, Robinson Esmit Arboleda, alias ‘Orejas’, y Susana Ceballos, alias ‘La Discípula’, son dos de los seis presuntos integrantes de la secta satánica conocida como ‘Los Carneros’, que sería la responsable del homicidio del niño, a quien primero habían reportado como desaparecido.
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Condenan a dos de los presuntos responsables del sacrificio de Maximiliano en ritual satánico
El pasado 21 de septiembre de 2022 en el corregimiento de La Cruzada en Remedios Antioquia, se reportó la desaparición de Maximiliano y todas las autoridades, amigos y conocidos salieron a las calles para buscar al menor, que supuestamente había desaparecido cuando supuestamente salió a hacer un mandado.
La Fiscalía General de la Nación logró establecer que alias ‘Orejas’ transportó a Maximiliano en un motocarro a zona rural entre los municipios de Remedios y Segovia donde días después fue encontrado el cuerpo. En este hecho alias La Discípula, que sería su pareja sentimental, sería su cómplice.
Ante la confesión y llegar un acuerdo avalado por un juez de la República, el hombre fue condenado a 40 años y 10 meses en prisión, mientras que su pareja deberá pagar una pena de 5 años y 8 meses también en prisión.
“El trabajo articulado de la Fiscalía y la Policía de Infancia y Adolescencia logró determinar que el niño fue golpeado indiscriminadamente por un grupo conocido como Los Carneros, en medio de un ritual para ubicar una supuesta guaca con oro. El cuerpo del menor fue exhumado por funcionarios del CTI, con el acompañamiento de alias Orejas, quien entregó información sobre la ubicación de la guaca donde fue inhumado”, dijo Daniel Parada, director de Fiscalías en Antioquia.
Aún están en el juicio la mamá, el padrastro, la abuela y la pareja de esta última, cuyos avances aún se desconocen porque tienen reserva a tratarse de un menor de edad.
