Hablar de Puerto Rico nos lleva a pensar en sus playas paradisiacas, su rica cultura y su deliciosa comida. Es natural que el azul del cielo se mezcle con el agua del mar que rodea a la isla. Al aterrizar no es raro que la salsa, el merengue y la bomba le den la bienvenida a quienes están listos para lo mejor de la isla.
PUBLIMETRO COLOMBIA viajó a Puerto Rico para dar a conocer las mejores recomendaciones que dan muestra de la cultura, los destinos soñados y los planes inolvidables que Puerto Rico ofrece a los turistas. Eso sí, la primera recomendación es que si usted quiere vivir la isla al máximo debe alquilar un vehículo para trasladarse por los diferentes municipios.
Día 1: Recorra el ‘viejo San Juan’
La mayoría de los vuelos que llegan a Puerto Rico aterrizan en el aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín. En el caso de Colombia diariamente salen vuelos directos que solo tardan dos horas desde Bogotá hasta San Juan. Aproveche que llega a la capital para turistear.
En San Juan encontrará zonas hoteleras, casas clásicas, calles empedradas y mucha historia. Durante los recorrido podrá ver cómo la ciudad ha migrado a nuevos géneros musicales sin dejar de lado a sus raíces como la salsa y la bachata.
Para el turista, las calles llenas de color con aires clásicos se convierten en spots perfectos para fotografías mágicas. De hecho, si usted conoce Cartagena sentirá un aire familiar al caminar por el ‘viejo San Juan’.
En la noches, el centro de la capital deja ver cómo la música, el reguetón y los nuevos ritmos hacen retumbar las casas clásicas con propuestas bastante creativas. Aquí la experiencia principal de la noche es dejarse llevar por los diversos sabores de los cocteles y la oferta gastronómica que ofrece la capital.
Una de las recomendaciones para empezar a conocer la gastronomía de la isla es el restaurante Casita Miramar. Allí podrá conocer el bacalao frito, las sopas de verduras y mucho más.
Día 2: Ponce, la cuna de la música en PR
Emprenda un viaje de una hora y media hasta Ponce, la ciudad que fue la cuna de la música y el arte de Puerto Rico. Allí podrá conocer de la mano de guías turísticos las historias que esconde esta ciudad. Podrá conocer cómo el conquistador español Juan Ponce de León llegó a la isla, cuáles fueron las tendencias de esta ciudad liberal y quiénes han sido sus referentes musicales.
Ponce, es la cuna de algunos de los músicos más famosos de Puerto Rico. En esta región nacieron y desarrollaron sus talentos personajes como: Héctor Lavoe, Cheo Feliciano, Ismael Quintana, Draco Rosa y José Feliciano, por nombrar algunos.
También puede pasar a una de las plazas tradicionales de Puerto Rico, explorar la gastronomía y ver la representación de enormes leones que reflejan las raíces de la ciudad boricua.
Aproveche el recorrido para almorzar en Níspero Asador, Vinos y Coctelería. Un restaurante que recoge lo mejor de la cocina puertorriqueña junto con la gastronomía internacional. La especialidad de la casa son las carnes.
Día 3: Paraísos playeros puertorriqueños
Puerto Rico es sinónimo de playas y para disfrutar de las aguas cristalinas hay que trasladarse hasta Lajas, ubicada en la costa suroeste de Puerto Rico. Allí se encontrará con La Parguera, un poblado costero conocido por su belleza natural, su ambiente tranquilo y su rica cultura.
La recomendación es hospedarse en la zona urbana muy cerca a las playas, así a tan solo algunos pasos podrá tomar un bote para dirigirse a una especie de pequeñas islas que conservan el agua cristalina. Si usted es amante de la naturaleza, podrá ver de primera mano cómo los manglares y la biodiversidad son el principal atractivo de esta zona. De hecho, una de las experiencias más llamativas va por cuenta de Caribbean Chiliboats.
Caribbean Chiliboats es una experiencia única en la que los turistas hacen un recorrido por la Reserva Natural del Caribe en La Parguera. El principal diferencial de este recorrido es que el trayecto se hace en un tipo de bicicletas acuáticas mezclando ejercicio y naturaleza, lo que a su vez no genera impactos en los ecosistemas porque no se requiere de motores ni de elementos contaminantes.
Día 4: Noche inolvidable con la bahía bioluminescence
La bahía bioluminiscente de La Parguera es la única biolaguna que permite practicar snorkel. Allí se vive una experiencia inimaginable en medio de la oscuridad. Pues, al caer la noche los turistas pueden entrar al agua para ver como los plancton se activan con el movimiento para dar un brillo fluorecente al agua.
El recorrido consta de 20 minutos desde la orilla hasta la laguna que queda ubicada en medio de diversas montañas. Luego, se podrá nadar durante 30 minutos, para después volver a la orilla. Eso sí, el recuerdo queda en la mente porque es casi que imposible poder grabar un video o tomar una fotografía.
Día 5: Emprendimientos y mercados locales
Aproveche el último día para ir a los mercados locales o conocer más sobre la economía de la isla. Una muy buena opción es la Hacienda Verde Tahití. Una hermosa finca de 25 acres que cultiva pitahaya y plantas ornamentales, con cuatro alojamientos únicos. Este destino cuenta con procesos totalmente sostenibles donde toda la producción de alimentos es orgánica.
En caso de tener más noches libres, esta es una alternativa viable porque la propiedad no tiene contaminación lumínica alrededor, perfecta para observar el cielo estrellado.