Como cada año, el cielo se llena de varios destellos luminosos gracias a una lluvia de meteoros que pasa cerca de nuestro planeta durante diversas temporadas. Y si bien no hace mucho que la Delta Acuaridas va terminando de pasar, la tanda de Perseidas ya está haciéndose presente. Sin embargo, en esta oportunidad las condiciones para disfrutar de este espectáculo celeste son un poco más complicadas debido a un par de factores. Por eso te explicamos cómo puedes aprovechar el mejor momento para ver este acontecimiento.
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Por lo general, ver una lluvia de meteoros puede ser complicado si vives en una gran ciudad iluminada, pero si logras apartarte un poco de grandes fuentes de luz y encuentras un lugar tranquilo es posible tener un asiento de primera fila para este espectáculo. Pero en esta ocasión las cosas se complican un poco más.
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De acuerdo con el portal Space, técnicamente desde el 9 de agosto la lluvia de meteoros Perseidas es visible desde nuestro planeta, pero solo mostrando algunos pocos destellos. No es sino hasta el 11 y 12 de agosto que, en teoría, se podrá observar en todo su esplendor. Sin embargo, hay un pequeño detalle que podría dificultar la visibilidad de estos pequeños cuerpos celestes y es por causa de otro evento astronómico: la última “superluna” del año.
La brillante luz de la Luna de Esturión del 11 de agosto complicará la visualización del pico de la lluvia de meteoritos, por lo que no será uno de los espectáculos más impresionantes.
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Sin embargo, hay dos alternativas para esto. La primera de ellas es aprovechar lo que los expertos consideran el mejor momento para observar este evento que es el miércoles, 10 de agosto, cerca de la 8 de la noche, hora colombiana. A pesar que la lluvia no se encuentra en su punto más alto, habrá una buena cantidad de meteoros que pueden ser visibles gracias a que la “superluna” aún no estará tan brillante.
Otra opción es mirar la lluvia de meteoros de manera digital. Si bien no es la misma experiencia, el Proyecto del Telescopio Virtual en Estados Unidos está organizando una transmisión en vivo por Internet el 10 de agosto, antes de que la Luna alcance el brillo máximo.
