Héctor Lavoe es uno de los cantantes más influyentes en la historia de la salsa, reconocido por su inconfundible voz, su estilo único, la vida que llevó y que se vio reflejada en sus canciones. Nacido Puerto Rico, en 1946, se convirtió en una de las figuras más icónicas del género, siendo pieza clave en la internacionalización de la salsa durante las décadas de los 80. Pero algo que muchos no recuerdan de ‘El Cantante’ es que vivió en la ciudad de Cali.
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Para los melómanos, son varias canciones de la lista de Héctor Lavoe que valen la pena ser escuchados, desde su época junto a la Fania All-Stars hasta su carrera como solista, estas mismas canciones que se siguen escuchando en la capital de la salsa en Colombia, la ciudad de Cali. Una de las anécdotas que más recuerda de este querido puertoriqueño, fueron los tres meses que vivió en Colombia y tuvo la oportunidad de convivir con varios de sus fanáticos en noviembre del 1982.
Según lo retrata Alejandro Aguirre en su libro ‘71 días, retrato de Hécto Lavoe en Cali’, el cantante llegó a la ciudad de Cali buscando huir un poco de su problema con las drogas y a pasar parte de uno de los momentos más oscuros de su vida, pero de los más especiales en su carrera artística. Al parecer, y según lo dijo el autor para Infobae, el quería desconectarse de su vida en Nueva York y tener más tranquilidad: “Realmente Héctor no iba a cantar, él vino fue a descansar, a vivir, una vida más tranquila, a apaciguarse de ese furor neoyorquino de la estrella que era y el momento que estaba viendo él”.
Al final, el cantante se despidió de la ‘sucursal del cielo’ en enero de 1989, unos años antes de su fallecimiento y siguió con su vida artística en uno de sus mejores momentos creativos y con más éxitos, tales como ‘Triste y Vacía’.
¿De qué murió Héctor Lavoe?
Héctor Lavoe falleció el 29 de junio de 1993 a los 46 años en Nueva York a causa de complicaciones derivadas del SIDA. Su salud se vio gravemente afectada tras contraer la enfermedad, lo que debilitó su sistema inmunológico y lo hizo vulnerable a diversas infecciones. Además, su vida estuvo marcada por problemas de adicción y tragedias personales, lo que contribuyó a su deterioro físico y emocional en sus últimos años.