‘Yo me llamo’ es el concurso de imitación más popular de Colombia, cautivando a millones de hogares durante más de una década. Cada noche, a las 8:00 pm, familias se reúnen para disfrutar de las mejores imitaciones de sus artistas favoritos, convirtiendo al programa en un fenómeno televisivo. Desde su primera emisión en 2011, el concurso ha contado con la presencia inconfundible de Amparo Grisales como jurado principal, quien, junto a César Escola, ha cimentado la identidad del reality. Aunque el tercer jurado y los presentadores han variado a lo largo de los años, la dupla Grisales–Escola sigue siendo esencial para el éxito del formato.
PUBLICIDAD
Le puede interesar: ‘Romeo Santos’ se convirtió en el tercer eliminado de ‘Yo me llamo’; Amparo hizo caras de disgusto al escucharlo
En esta décima temporada, el salsero Rey Ruiz se suma como jurado invitado, aportando su experiencia musical en la búsqueda del “doble perfecto”. Conocido como “el Bombón de la Salsa”, Rey Ruiz añade un toque internacional que ha logrado conquistar a una amplia audiencia, enriqueciendo la competencia con su visión y carisma.
Sin embargo, la nueva edición también ha generado controversia. Los seguidores han criticado el comportamiento de Grisales, señalando que su actitud ácida y sus comentarios mordaces han deteriorado la imagen del programa. En redes sociales se han difundido opiniones negativas, donde algunos usuarios aseguran que su grosería y maltrato hacia los participantes han impactado de manera desfavorable en el concurso. “Que lamentable el deterioro del programa por la grosería de Amparo”; “No aporta nada bueno”; “Definitivamente el comportamiento de Amparo es poco profesional”, fueron los comentarios más recurrentes entre quienes critican su conducta.
Por otro lado, hay quienes defienden a la actriz, argumentando que su estilo y carácter han sido parte fundamental de la esencia del show desde sus inicios. “Esa ha sido su forma de ser durante todos estos años, y sin ella el programa no sería lo mismo”, opinan algunos, destacando la autenticidad que aporta al concurso. Así, mientras el formato sigue evolucionando, ‘Yo me llamo’ continúa siendo un espacio donde la excelencia en la imitación se mezcla con la polémica, manteniendo a la audiencia expectante ante cada nueva edición.