La hija mayor de Tatán Mejía, Guadalupe, dejó en evidencia un detalle penoso relacionado con los hábitos de higiene de su papá, compartiendo a través de sus historias en Instagram cómo la pequeña es afectada por este aspecto en particular, en especial durante el último viaje por carretera que emprendieron como familia.
La niña mayor de esta pareja de colombianos suele estar involucrada en algunos de los proyectos audiovisuales de sus padres en las redes sociales, figurando como actriz en los diferentes clips que ellos suben en Instagram, bien sean recreativos o con fines publicitarios.
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Sin embargo, la niña también se encarga de compartir varias escenas a través de su perfil en Instagram, desde fotos con sus familiares, pasando por algunos eventos a los que asiste, hasta reportar detalles sobre sus viajes familiares.
Y a propósito de esto, la hija mayor de Tatán Mejía y Maleja Restrepo aprovechó una historia en Instagram para actualizar a sus seguidores sobre un detalle relacionado con su más reciente viaje a Estados Unidos en donde estuvo conviviendo con sus padres y con su hermana en una casa rodante, pero también compartió una maleta con el motociclista, lo que dio pie a que revela un aspecto comprometedor sobre él.
“Fuimos de viaje, y nosotros siempre compartimos maleta, y me pasa algo que mi ropa se empieza a manchar del olor de la chu*** de la ropa de mi papá (...) Huele horrible”, dijo la pequeña entre risas.
Sin embargo, el atleta se defendió diciendo que estuvieron encerrados durante ocho días en la casa rodante sin poder lavar la ropa, razón por la cual no podía hacer mucho al respecto. También destacó que lo que ella percibía no era un mal aroma, sino “olor corporal a hombre, a macho”.
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Guadalupe dejó en evidencia un detalle penoso de la higiene de su papá
En el mismo clip, la niña aseguró que ella es la persona más limpia de la casa, dando a conocer que se baña a diario, mientras que revelaba que Tatán Mejía no hacía lo mismo.
De hecho, el motociclista confesó en la misma historia que se bañaba “cada dos días”, generando un comentario sarcástico en la niña: “ajá, limpiecito”.
El colombiano también señaló que se afeitó los vellos de sus axilas exclusivamente para complacer a Guadalupe, gesto que la pequeña agradeció, indicando además que era algo que se veía “horrible”.