Juan Pablo Obregón, reconocido por su papel en la icónica serie colombiana Padres e hijos, ha dado un giro radical a su vida y carrera profesional. Aunque formó parte de varias producciones televisivas, el actor decidió alejarse de las cámaras para seguir un camino de fe y emprendimiento, dedicando su vida a Dios y encontrando una nueva misión en la espiritualidad.
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Obregón es ahora el fundador de Santo Corazón, una tienda de indumentaria cristiana que busca transmitir mensajes de amor, fe y esperanza a través de sus productos. Esta decisión surge como parte de un proceso personal de transformación y búsqueda de propósito, como él mismo afirmó en una entrevista para Lo Sé Todo: “Lo que busco son opciones para vivir mi vida y que estas me gusten. Llevaba años buscando opciones y me cansé de esperar a que me llamen”.
Con Santo Corazón, Juan Pablo no solo encontró una forma de sustento, sino también una oportunidad para conectar con otras personas a través de su fe. Sus productos, que incluyen camisetas, accesorios y artículos inspirados en valores cristianos, han recibido gran aceptación entre quienes comparten su mensaje espiritual.
El actor demuestra que la reinvención es posible y que, más allá del éxito en la pantalla, se puede encontrar satisfacción en proyectos que reflejan convicciones y valores personales. Su historia inspira a otros a perseguir sus propios caminos, sin temor a explorar nuevas posibilidades. Juan Pablo afirmó: “Es un negocio que es bonito, pero toca saberlo hacer. Yo mismo miro qué opciones podría haber y los compro, los arreglo, los que no tenga que arreglar solo los vendo”.
