Gabriela Tafur le confesó a sus seguidores que su faceta de estudiante puede llegar a ser bastante estresante, al punto de que puede llegar a tomar medidas poco agradables para ella bajo esta etapa, razón por la que aprovechó para hablar sobre el mal habito que desarrolló cuando se encuentra bajo mucha presión, algo que le ha sucedido en estos últimos días.
Desde mediados de 2023, la modelo ha estado menos activa en las redes sociales a propósito de su faceta de estudiante en Stanford, contando en pocas ocasiones que sus estudios y otras responsabilidades laborales y personales la han tenido muy ocupada y alejada de las plataformas digitales.
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Sin embargo, de vez en cuando aprovecha algún momento libre para publicar detalles de su vida en las redes sociales, desde aspectos laborales hasta otros personales en donde comparte momentos divertidos en pareja, algunos viajes y hasta imágenes de su nueva afición: esquiar.
Pero no todo es diversión para Gabriela Tafur, ya que a través de una historia de Instagram contó que su faceta de estudiante puede llegar a ser muy estresante, hablando un poco sobre lo que vivió hace pocos días.
Al principio contó que cuando está en este modo no duerme, se angustia y se estresa, bromeando respecto a que descuida su higiene personal. Pero también admitió que en algunas oportunidades se lo busca ella misma.
“Ayer me quedé hasta las 2:30 de la mañana por andar de vaga e irme a esquiar el fin de semana. Tenía que entregar una aplicación para un proyecto que tengo, y tenía que entregarla hoy a más tardar a las nueve de la mañana y tenía clase a las ocho”, empezó a narrar la modelo.
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Gabriela Tafur desarrolló un doloroso hábito por el estrés
En la misma historia, la colombiana le contó a sus seguidores que tanta presión terminó pasándole factura, ya que terminó por lastimarse el labio al mordérselo repetidas veces de manera involuntaria.
“Y del estrés no hice sino morderme el labio, lo tengo descarnizado. Pero, a ver, no voluntariamente sino que no sé por qué un día me lo mordí, me saqué sangre, entonces se inflamó y cada vez que hablo, cada vez que como, cada vez que como chicle, lo que sea, me lo muerdo. Entonces me sale sangre, se vuelve a inflamar y así vamos en este ciclo vicioso”, contó Gabriela Tafur en la historia.