Darío Gómez fue uno de los artistas más populares en Colombia y en América Latina en la década de los 90 y principios del 2000. Conocido como ‘El Rey del Despecho’, sus canciones hablaban sobre el amor, el desamor y las dificultades de la vida.
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Durante su carrera, Darío Gómez logró ganarse el corazón de miles de seguidores en Colombia y en todo el mundo. Sus canciones eran verdaderos himnos para aquellos que habían sufrido por amor, y su voz inconfundible lo convirtió en uno de los artistas más queridos de la música popular.
Es difícil creer que ya han pasado dos años desde su partida, pero es importante recordar y honrar a aquellos que dejaron un legado artístico a nivel nacional e internacional. La música de Darío Gómez sigue siendo escuchada y admirada por muchos, y su legado continúa vivo.
De hecho, su hermano Hernán Gómez también es un talentoso cantante y ha seguido los pasos de su hermano mayor en la música popular colombiana. Ahora bien, el artista confesó en el programa de Caracol ‘La red’ la difícil situación que vivió con la muerte de su hijo en pleno concierto.
“Estábamos con mis hermanos y yo en un concierto que íbamos a dar en un Coliseo, el cual estaba lleno, gracias a Dios. Cuando comenzó el evento, mi niño, Hernán Darío, estaba allí y se me acercó y me dijo: ‘Papi, cante bien lindo que la gente lo está esperando a usted’. Me dio un beso en la mejilla y me contó: ‘Ya vengo, voy a recoger a mi novia’”, dijo Hernán Gómez.
Después dijo: “A los 10 minutos yo salía a cantar y vi que la gente estaba saliendo del Coliseo, yo no entendía. Cuando mi hermano Wilson me dijo, es Hernán Darío, pero le dije, no me digas nada que voy a salir a tarima, y este agachó la cabeza”.
Gómez comenzó a cantar, pero su mamá no se aguantó y le dijo en tarima: “‘Hernáncito’ cántale a tu hijo ‘Nadie es eterno en el mundo’ porque el niño se nos fue al cielo, se nos mató Hernán Darío”.
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“Me imaginé que a mi hijo le habían quitado la moto o algo así, pero jamás me imaginé que se había muerto. Yo comencé a cantar, pero yo no aguanté más, me puse a llorar y paré el concierto”, señaló el cantante.
“Me fui al hospital con mi esposa y mi mamá y ahí vi a mi niño estaba ahí tiradito, y ya muertecito, desnucado, con la pierna magullada”, relató el artista de música popular.
Según Hernán Gómez, su hijo recogió a su novia y, de regreso hacia el Coliseo, intentaron esquivar un hueco, pero lamentablemente chocaron con dos jóvenes que viajaban en una moto y aparentemente estaban en estado de embriaguez.
“Se mataron todos, menos la muchacha que venía con mi hijo”, finalizó Gómez.