Muchas veces atreverse a hacer un ejercicio de introspección y recordar cómo se era de niño, así como los programas que le gustaban, a qué le gustaba jugar, y en especial qué es lo que más extraña, son episodios que viven las personas adultas en búsqueda de la felicidad y algo similar ha explicado Camilo.
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En su más reciente publicación el intérprete de ‘Manos de Tijera’ ha dicho que para él la creatividad y la curiosidad son los hilos que te mantienen conectado con el niño del pasado. y al que siempre cada persona podrá volver, siempre y cuando se le dé el espacio que este pide.
“Todo el mundo quiere ser feliz ¿no? todos queremos ser felices y todo el mundo está buscando por todos lados claves para ser feliz, y hay un montón, pero yo me conecto con una que es la curiosidad, la conexión que tienes tú con tu curiosidad y con tu creatividad. Y por eso cuando eras niño eras tan feliz porque estabas conectadísimo y tu vida entera era una celebración de tu curiosidad y de tu creatividad”, indicó en primera instancia Camilo.
Seguidamente hizo referencia a algo más que importante y es ese punto en el que muchas cosas empiezan a dejarse de lado, sin embargo, recordó que hay algo atado a esos recuerdos con los que se puede hacer fuerzas para traerlos de nuevo al presente.
“Cuando creces vas perdiendo cosas, pero hay un hilo que se mantiene y es tu conexión con tu creatividad, y si tú jalas de ese hilo vuelves otra vez a permitirte ser ese niño ¿no? y muchas veces es menos complicado de lo que parece y es más cuestión de decir separar un espacio en mi calendario y un espacio físico donde yo pueda permitirme crear sin estar pensando en que tiene que ser perfecto”
— Camilo
Precisó que prioritario tener un lugar en el cual conectarse con ese niño para así darle rienda a la creatividad y fomentar así ese ligero viaje al pasado para involucrarlo en el presente y fomentar el proceso de creatividad.
“Sin estar pensando en que tiene que salir con proyección a ser algo excelente, celebrado y premiado. Un lugar en el que uno pueda ser y hacer lo que uno era y hacía cuando uno era niño. Ese lugar puede ser tu cama, puede ser tu cuarto, un escritorio, afuera, en una playa, en un jardín, en una bodega, en una especie de taller creativo”, finalizó Camilo.
