Tatán Mejía le compartió a sus seguidores algunas técnicas caseras para ahorrar algunos pesos en el proceso, mostrando cómo repara los zapatos de sus hijas con algunas herramientas en casa. También aprovechó para contar algunas anécdotas de su infancia en relación a este tema y cómo lo vivió él en su momento.
El atleta suele compartir todo tipo de detalles de su vida, desde su faceta profesional en el mundo de la velocidad y el entretenimiento, pasando por su pasión por la cocina al demostrar lo que ha estado aprendiendo desde que terminó su paso por ‘MasterChef’, hasta diversas ocurrencias y anécdotas.
Puede leer: De tal palo: hija de Tatán Mejía demostró sus habilidades de motocross en una competencia
Pero también suele hablar mucho de su familia y compartir diversos detalles junto a su esposa, Maleja Restrepo, y sus dos hijas, Guadalupe y Macarena. Junto a ellas protagoniza todo tipo de videos en donde no solo muestra su lado más cómico, sino también lo orgulloso que se siente de ellas.
Pero en esta oportunidad, el deportista dejó ver que, si bien tienen un estilo de vida acomodado dado el estatus que tienen él y su esposa, aún encuentran maneras de economizar en ciertos gastos, mostrando que con algunas herramientas puede reparar los zapatos de sus hijas para que duren unos meses más.
En el clip se ve a Tatán Mejía sentado en un escritorio mientras tienen en sus manos una zapatilla deportiva de sus hijas pintando el calzado con pintura blanca, cubriendo algunas manchas amarillentas producto del uso, el sol y el paso del tiempo.
“‘No, mira, que está amarillito así en el fondo’. ‘Diga nada más, ya se lo arreglo’”, contó el presentador en la historia mientras iba cubriendo la zona inferior del calzado.
Lea también: Al estilo MasterChef: Tatán Mejía descrestó al preparar una receta gourmet con pocos ingredientes
Tatán Mejía compartió una anécdota de su infancia con los zapatos
En la misma historia, el colombiano aprovechó para revelar que cuando era un niño, así como está haciendo él era cómo solucionaban los problemas con sus zapatos, indicando que la opción de comprar un par nuevo estaba descartada hasta que realmente no pudieran entrar en los pies.
“A nosotros nos cambiaban los zapatos ya cuando quedan chiquitos. No cuando se dañaban, cuando quedan chiquitos era que me compraban unos nuevos”, dijo Tatán Mejía mientras pintaba uno de los zapatos de su hija.
También compartió su técnica para evitar que se vea que están pintados, la cual él mismo aplicaba durante sus años de infante: “eso caminando rapidito no se nota”.