El último capítulo de Yo Me Llamo estuvo marcado por el talento y las emociones. En esta fase del programa, los concursantes se encuentran ‘luchando’ por ganarse un cupo y abrirse camino entre la competencia.
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En medio del capítulo 24 del programa se presentó una particular escena que dejó a los jurados con la ‘boca abierta’. En este caso aplica el dicho que dice ‘nadie sabe con la sed que otro vive’.
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Aunque todo transcurría en completa normalidad entre las presentaciones, todo cambió cuando salió al escenario el doble de Vicente Fernández. Aunque el participante intentó realizar su presentación de la mejor manera, fue cuestionado por un particular detalle durante su interpretación. Todos los jurados criticaron al personaje, pero Amparo Grisales fue una de las que más se ‘despachó' contra el artista.
Al parecer, al imitador le reclamaron por haber cantado sin abrir suficientemente la boca. Lo que nadie sabía, es que detrás de ese detalle había una preocupante historia.
El doble de Chente Fernández dijo que tuvo un peligroso percance de salud.
“Me dio una parálisis facial y eso me afectó la vocalización”, indicó el concursante sobre un incidente que tuvo en medio del concurso, apenas un día antes de esta presentación clave.
Ante las declaraciones, los jurados quedaron sorprendidos y preocupados por la salud del participante. Incluso se mostraron algo arrepentidos por los señalamientos que habían hecho desde el desconocimiento y pasaron a darle mensajes de aliento al imitador.
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La que más afectada se mostró fue Amparo Grisales, quien aseguró sentirse “achantada”, después de que el imitador se retirara del escenario. Eso sí, todos los jurados le mostraron su apoyo al concursante y le exaltaron su profesionalismo.