De nuevo Carlos Mauricio Gómez, mejor conocido como ‘La Liendra’, es epicentro de las críticas, y esta vez no por su video íntimo, sino por una referencia que hizo al Holocausto a manera de chiste, que no tuvo nada de gracioso.
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Todo se dio por medio de sus historias en la red social Instagram desde donde iniciaba lo que denominó “ronda de chistes negros” y en el que habló sobre la causa de la muerte de Adolf Hitler con una comparación que desató las críticas.
“Rondas de chistes negros, ¿Por qué se suicidó Hitler? Porque le llegó la factura del gas ja ja ja, pues como él quemaba a la gente y ah, bueno, en fin, ya entendieron”
— ‘La Liendra’
El video que fue publicado por una cuenta dedicada al espectáculo colombiano acumuló diversas reacciones en las que piden cancelar al creador de contenido por lo dicho, mientras que otros le piden que se documente sobre una de las tragedias más mortíferas de la historia en el mundo.
“¿Quién en su sano juicio ve este personaje? Cancélenlo y listo, como sea quiere subir esos seguidores que lleva dos años con los mismos 😅 😅”, No podemos esperar nada más de este personaje mediocre, sus seguidores son iguales a él y seguramente le pusieron muchos emojis riendo sin parar 🤷🏽♂️” y “La ignorancia es atrevida”, son solo algunas de las reacciones que destacan.
¿Por qué no debió hacer un chiste del Holocausto?
Durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis asesinaron a casi seis millones de judíos europeos. Este genocidio es conocido con el nombre de Holocausto. El término proviene del griego antiguo y significa “quemarlo todo”.
Antes de la Segunda Guerra Mundial, esta palabra era ya, en ocasiones, utilizada para describir la muerte de un gran grupo de personas, pero desde 1945 se ha convertido casi en sinónimo del asesinato de judíos europeos durante la Segunda Guerra Mundial.
Las víctimas de los campos de exterminio eran ejecutadas sobre todo por gaseamiento, en instalaciones permanentes construidas para este propósito o en furgonetas. Algunos campos de concentración nazis, como Auschwitz y Majdanek, exterminaban a los prisioneros a finales de la Segunda Guerra Mundial mediante gas venenoso y trabajo extremo en condiciones de inanición.