‘La Jesuu’ sorprendió a muchos de sus seguidores al exponer una divertida actividad con filtros de TikTok, pero que terminó convirtiéndose en una experiencia espeluznante, dejando ver que es posible que en su apartamento este viviendo “un fantasma”. Y si bien se mostró asustada la principio, no dudó en sacarle el lado cómico a la situación.
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A la creadora de contenido le gusta experimentar con diversas temáticas para sus videos en las redes sociales, buscando tópicos distintos o incluso usando filtros o pelucas diversas para interpretar varios personas y situaciones hilarantes. Pero todo esto sin cambiar su particular sentido del humor.
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Y mientras experimentaba con un filtro de inteligencia artificial de TikTok en donde convierte a las personas en personajes de animé, se llevó un susto gracias al comentario de uno de sus seguidores. Y es que si bien había funcionado con ella y otros individuos, hubo una oportunidad en la que terminó por reconocer una forma aleatoria en su cocina.
“Reina, ¿sabía que cuando la gente usa este filtro, cuando muestran el resultado y hay más gente es porque son espíritus? Todo el mundo habla de eso en Twitter”, dice uno de los mensajes que le llegaron a La Jesuu a propósito de uno de los videos que subió con este filtro.
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Al principio, la joven se mostró un poco asustada al respecto, mostrando cierta incredulidad y pidiéndole más información a sus seguidores.
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Otra de las personas que estaba con ella también hizo el mismo experimento desde un teléfono diferente y usando un ángulo distinto, pero obtuvo el mismo resultado con una figura misteriosa en el fondo.
También decidió grabar en otro lugar del apartamento, obteniendo un resultado similar con una figura extraña, pero diferente a la que aparecía en su cocina.
Y de cara al final de sus historias, La Jesuu decidió ponerle fin a este tema, llenándose de valor al salir a buscar al “fantasma” para exigirle respeto. También recurrió a entidades religiosas para su protección y anunció que su visitante no estaría haciendo vida en el apartamento sin pagar una cuota: “me cubro con la sangre de Cristo, y si se queda, paga arriendo como sea”.
